El Concello ha denunciado ante la Guardia Civil el atentado sufrido por la embarcación municipal Desaprensivos, canallas, depravados... Esos son sólo algunos de los calificativos que ayer aplicaron los vecinos de O Grove a los autores del incendio que de madrugada había afectado al barco de A Lanzada. La imagen fue colocada en la primera rotonda de los cuatro carriles «para darlle a benvida a todos os que cheguen ó noso municipio». Pero pocos días ha durado ese saludo. Aunque se desconoce quien ha sido el culpable de esta acción, entre los mecos ha anidado ya el convencimiento de que «foron os de Noalla». Y es que el conflicto por el istmo sigue coleando y viciando las relacciones entre dos poblaciones vecinas.
15 jun 2001 . Actualizado a las 07:00 h.R. E. O GROVE La Guardia Civil y la Policía Local de O Grove investigan el incendio que arrasó parte del barco ornamental colocado en la primera rotonda de A Lanzada. De momento, no han encontrado ninguna pista que aclare quien es el autor de ese acto vandálico. Pero los agentes saben hacia donde miran ya todos sus vecinos. «Dicen que fueron los de Noalla por todo lo que está pasando desde hace un tiempo», explican algunos de ellos. «Pero quien sabe. Igual fue algún simpático que no tiene nada que ver en toda la historia». El alcalde de O Grove, Miguel Pérez, dejó ayer claro que «o Concello non pretendía, en ningún caso, provocar un enfrentamento con ningún grupo. I é que os terrenos poderán ser propiedade duns ou doutros, pero eso está dentro do municipio do Grove, sen dúbida». El primer edil insiste en que el monumento había sido colocado en su actual ubicación con un único objetivo: «darlle á benvida a todos os que viñesen ata aquí». Y por eso lamenta que «alguén teña incitado a un acto deste tipo, que só pode ser obra dun depravado». El acto fue denunciado ante la Guardia Civil. «¿Que imos facer?. Aínda non sabemos».