La plantilla absorbe la mitad de un monto de tres millones de euros en Lugo
En lugar destacado del ránking de los equipos de la ACB con mayor rentabilidad por gasto se encuentra el Río Breogán, que a pesar de disponer del tercer presupuesto más bajo de la competición, se clasificó para la fase final de la Copa del Rey y hasta la penúltima jornada estuvo entre los aspirantes a disputar las eliminatorias por el título. El consejo de administración, con Tito Díaz como cabeza más visible, debió hacer auténticas virguerías para conseguir tanto con tan poco.
Según las cuentas aprobadas en la última junta general de accionistas, el equipo lucense encaró su regreso a la Liga Endesa con una partida inferior a los tres millones de euros (2.933.000). De esa cantidad, 1.570.000 se destinaron a la composición de la plantilla y algo más de 500.000 fueron para el plan de viabilidad. El resto se repartió entre el personal del club (185.000), los arbitrajes, la organización de partidos y demás cuestiones relacionadas con las necesidades del club, que ingresa casi la mitad de su presupuesto (1.438.000) de la publicidad y sus patrocinadores.
Sar suma once permanencias sin apenas apoyos institucionales
El Obradoiro suma once temporadas consecutivas en la ACB siendo uno de los clubes que menos dinero ingresa de las instituciones. En ninguna de ellas ha alcanzado los 300.000 euros para sus arcas.
Del presupuesto de este curso, 3,2 millones de euros, la partida mas cuantiosa es la destinada a la primera plantilla y el cuadro técnico, con 1,8 millones de euros. Alrededor de un tercio de esos algo más de tres millones corresponde al pago de impuestos (incluyendo las retenciones que computan en el dinero para jugadores y entrenadores).
Con la temporada recién terminada, el primer cometido en el que se están centrando los dirigentes es el de poner en marcha el proyecto para la campaña 2022/23. Entre esta semana y la que viene deberían quedar trazadas las líneas del próximo presupuesto.
El covid-19 ha obligado a la entidad de Sar a apretarse el cinturón. Antes de la pandemia el Monbus Obradoiro había conseguido armar un presupuesto de 3,5 millones de euros.