El Obradoiro deja huella con su laberinto de bloqueos y variantes

Manuel García Reigosa
M. G. REIGOSA SANTIAGO / LA VOZ

ANDAR MIUDIÑO

ADRIAN BAULDE

Los rivales reconocen las dificultades tácticas del baloncesto de Moncho Fernández

17 sep 2021 . Actualizado a las 16:41 h.

El Monbus Obradoiro encara su décimo primera temporada consecutiva en la Liga Endesa, cada año con un proyecto renovado y distinto, con matices en función de los jugadores de cada curso. Pero con el denominador común del baloncesto de Moncho Fernández. Es un equipo que se pasa mucho el balón, que trabaja buena parte de sus acciones de ataque a través de los bloqueos y no tanto a partir de las situaciones de bloqueo y continuación.

Es una puesta en escena que no pasa inadvertida a los adversarios. Es el caso de Guillem Vives, que visitará Sar el viernes de la semana próxima con el Joventut: «Tiene un estilo diferente a lo que vas preparando durante el año. Cuando llega el Obradoiro, sabes que juega un baloncesto un poco distinto al resto. Puede sorprender, pero da un resultado muy eficiente. Si no estás preparado, es muy difícil jugar contra ellos. Si vas llegando a lo que quieren ellos, estás perdido».

El base también destaca el papel que puede jugar la grada: «En Sar hay un ambiente chulo de baloncesto, muy bonito, con una afición que aprieta. Tanto en Valencia como antes con el Joventut he sufrido derrotas allí. Seguro que va a ser un partido muy complicado y espero volver a ver a la gente allí, en la Caldera de Sar, como antes de la pandemia».

El breoganista Sergi Quintela tampoco pasa por alto el peso de la pizarra en el conjunto santiagués: «El Obradoiro de Moncho hace un juego distinto y muy bonito, muy táctico, muy difícil de llevar a cabo».

En términos similares se pronuncia el veterano escolta del Manresa Rafa Martínez: «Moncho va cambiando el sistema, dentro de un estilo totalmente diferente. Juega mucho para los tiradores, con muchas variantes. Supongo que depende de que jugador esté en la pista para jugar de una manera o de otra. Es verdad que es complicado».

Dejan Todorovic

Dejan Todorovic, escolta del Tenerife, se suma a quienes dicen que «el scouting del Obradoiro es un quebradero de cabeza», y añade: «Especialmente para nosotros, los aleros. Juega con bloqueos indirectos y te obliga a perseguir mucho a sus tiradores. La base del juego del Obradoiro está en eso, en el tiro exterior y en mucha movilidad, con ataques largos que suelen acabar en los últimos tres o cuatro segundos de la posesión. Tienes que estar siempre muy atento, especialmente con la línea exterior, porque en cualquier situación hay un intercambio de posiciones o de bloqueos que te puede hacer daño».

Darío Brizuela, escolta del Unicaja de Málaga, se declara admirador del baloncesto que propone Moncho Fernández y apunta que «la semana de preparación contra el Obradoiro siempre es complicada porque tienes que hacer cosas a las que no estás acostumbrado». Pone el acento en el entramado de bloqueos indirectos y en la manera de hacer circular el balón.

La búsqueda de posiciones cómodas para sus tiradores es una constante en el baloncesto del Obradoiro, pero no un dogma de fe. La pasada campaña es un claro ejemplo. La presencia de Laurynas Birutis y Steven Enoch en el equipo se tradujo en un mayor abastecimiento de balones en posiciones cercanas al aro. En cualquier caso, el colectivo santiagués se significa por ser uno de los que más se prodiga en el tiro de tres en la Liga Endesa.