Tendemos con frecuencia a hacer comparaciones y no siempre es justo, porque los contextos son distintos. Ahora casi todos los equipos tienen cuatros muy abiertos, con cincos que salen a bloquear y generan muchos espacios difíciles de tapar.
En cualquier caso, no es habitual ver que un plantel de Moncho encaje tantos puntos. Y, a veces, puntos fáciles, por lo que hay menos opciones para el rebote defensivo. En parte, esa es una de las razones por las que el conjunto santiagués lleva menos rechaces en su propio aro.
Los rivales nos están haciendo bastante daño jugando desde el poste bajo. Sucedió este domingo, sin perder de vista que Shengelia es uno de los mejores de la Liga Endesa. O bien conseguía anotar o acababa encontrando a algún compañero en buena situación.
Estoy convencido de que el equipo irá a más. Suele suceder, porque encajar bien todos los ajustes requiere su tiempo. Además, estamos hablando de un Obradoiro que tiene mucho talento ofensivo y que está haciendo muchos más puntos en la pintura contraria.
El cuerpo técnico del Obra es especialista en ir mejorando semana a semana y aprovechar las cualidades de los jugadores. Hasta la fecha, quizás se echa en falta algo más de dureza en el juego interior, y no se están viendo tanto las ayudas. Y, dependiendo del cinco que esté en pista, los rivales explotan el uno contra uno porque hay jugadores a los que les cuesta más aguantar en esas situaciones y pasar los bloqueos.