De Primera Autonómica a la ACB

Miriam García
M. G. SANTIAGO / LA VOZ

ANDAR MIUDIÑO

Garrei

Óptica Val vuelve a colaborar con el Obradoiro

07 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El mismo Obra que ahora transita por su séptima campaña consecutiva en la ACB estaba en la temporada 2002/03 en Primera Autonómica. Eran tiempos de travesía judicial y de supervivencia, de muchas dificultades y menos eco. Y fue en ese curso cuando Óptica Val se sumó a la causa.

Aquel era un baloncesto aficionado, con presupuestos que estaban muy lejos de las siete cifras de los actuales, que tampoco resultaban sencillos de cuadrar.

Ana Val, gerente de la firma, recuerda que la vinculación empezó como muchas en el deporte no profesional, por un compromiso personal. La propuesta partió del entonces presidente del club, José Ángel Docobo, a quien conocía más por la astronomía que por el baloncesto.

«Era todo muy distinto -recuerda Val-, con otra dimensión. Cada temporada incluso quedábamos tres o cuatro veces con la plantilla para tomar algo. Fueron años muy entrañables».

De esa manera prendió la semilla del baloncesto, porque desde entonces, aparte de colaborar con un patrocinio que incluso daba nombre al equipo, se convirtió en una aficionada más que sigue disfrutando con el Obradoiro. De Primera Autonómica subió a Primera Nacional. También a la EBA, en la que jugó a la par que el primer equipo se estrenaba en la ACB, en la campaña 09/10.

Ana Val recuerda el brinco a la ACB como «lo más grande, después de una pelea tan larga por conseguirlo». Y ese salto, también económico, coincidió con un punto de inflexión. Alcanzado el propósito de llegar a la élite, Óptica Val se hizo a un lado. Hasta hace unos días, cuando cuajaron las conversaciones para reanudar la relación. No en los mismos términos, ya que no se trata de un patrocinio principal como el de hace tres lustros. Es un acuerdo más modesto, que se suma a la larga lista de empresas que colaboran con el club y que recupera para la causa a un socio histórico. Ana Val apunta que es un regreso con vocación de continuidad.