Pozas ve al equipo enfocado y con ganas de darle alegría a la afición

ANDAR MIUDIÑO

M. G. Reigosa

Espera un partido «durísimo» ante un Gipuzkoa Basket «muy complicado»

13 ene 2018 . Actualizado a las 17:37 h.

El Obradoiro superó la pasada campaña una plaga de lesiones y una racha de veinte jornadas en las que solo fue capaz de anotar dos victorias. Ahora lleva siete triunfos después de quince partidos disputados. Pero los seis últimos se han saldado con derrotas y da la sensación de que pesa más el desánimo del último mes y medio que las rentas y el trabajo adelantado en el mes y medio anterior, y más que hace un año.

Pepe Pozas, uno de los capitanes del equipo, entiende que son contextos distintos: «El año pasado había gente lesionada, jugadores que tenían que adaptarse a posiciones que no eran las suyas y era más normal, a lo mejor, que llegásemos a los finales de partido más justos de fuerzas». Este curso las lesiones están respetando al equipo y quizás por eso la perspectiva es distinta.

Detalles y momentos

El base apunta a la importancia de los detalles y los momentos puntuales de cada partido, y se decanta por analizarlos por separado: «En Sevilla fueron tres minutos y medio malos. La segunda parte que hicimos fue fantástica. La ganamos por catorce o quince». Pero no bastó.

Ante el Madrid la victoria se escapó por muy poco: «Estuvimos muy acertados, pero ellos lo estuvieron todavía más». Contra el Baskonia «faltó el acierto al final que ellos sí tuvieron». Frente al Estudiantes, sin embargo, «dejamos de defender en el minuto diez».

Pepe Pozas no es partidario de hablar de la defensa y el ataque como parcelas separadas y deja entrever que, a veces, las percepciones pueden verse condicionadas por el resultado final: «Estamos cometiendo fallos atrás, en ocasiones de concentración. Pero también hay que tener en cuenta que el rival es bueno. Y, cuando dejas de anotar, lo acusas en defensa porque el adversario encuentra más facilidades para correr, para buscar canastas en transición, que últimamente nos están haciendo mucho daño. Si metes, impides esas transiciones. En ocasiones, aun haciendo una buena defensa, nos acaban anotando y parece como si no hubiésemos defendido ni nada. Otras sucede al revés, que la defensa no es buena pero no te anotan, por falta de acierto, y parece que ha ido bien».

No obstante, hay una vertiente que Pepe Pozas garantiza: «El equipo tiene ganas de ganar, ganas de darle alegría a la afición y romper la racha negativa. Trabajamos duramente toda la semana para conseguirlo».

Advierte de que el Gipuzkoa Basket pondrá las cosas muy difíciles el sábado. Espera «un partido durísimo» porque «tienen muy buenos defensores, gente con mucho coraje, con Norel como gran referencia interior y pívots taponadores... Nos vamos a encontrar un equipo muy complicado».

Ya no se habla de la Copa. El base no cree que esa opción haya supuesto una presión añadida o haya desenfocado al colectivo: «Sabemos por lo que estamos y por lo que tenemos que trabajar. Es normal que con los resultados del principio se hablase de Copa y del mejor arranque, pero al menos yo no he notado más presión, ni dentro ni fuera».