Peixes Grallal muestra un extraño ejemplar de merluza albina en Covas

S. S. VIVEIRO / LA VOZ

VIVEIRO

PEPA LOSADA

El pescadero viveirense opta por no vender un ejemplar poco frecuente que llama la atención

25 ene 2020 . Actualizado a las 12:36 h.

Peixes Grallal exhibe en su escaparate de Covas (Viveiro) un curioso ejemplar de merluza albina fresca, descargado en el puerto de Celeiro. No es la primera vez que llega a la lonja viveirense una Merluccius Merluccius cuyo color habitual es negruzco en el dorso, gris en los flancos y plateado en el vientre. Similares a la de este viernes eran otras alijadas en el mismo mercado marinero al menos el pasado diciembre, en 2016 y en 2015.

Esta la capturó en los caladeros europeos de Gran Sol el Punta Candieira, con base en Celeiro. De alrededor de dos kilos de peso y unos setenta centímetros de largo, el propietario de Peixes Grallal, José Luis Chaves, opta por no vender una pieza tan poco frecuente que llama la atención de clientes y de quienes se enteran que pueden verla en su tienda. Pagada en lonja como pescado de calidad inferior a la habitual, costaría unos doce euros en la pescadería. Otro ejemplar idéntico de merluza albina, subastado también en Celeiro, se consumió varios meses atras en un restaurante del Occidente asturiano, donde lo aprovecharon para promocionarse ofreciendo un producto inusual.

Semanas atrás también llegó a la lonja de Celeiro un pez todavía más raro, una hembra de diablo marino, pez pescador o pez anzuelo, una Ceratias Holboelli que «atrapa» para siempre a los machos que copulan con ella. Ellos, enanos respecto a su pareja, mueren pronto si no encuentran hembra. Decenas de miles de lectores se interesaron por una especie sobre cuyo ritual de apareamiento describió en su Bestiario de amor Jean Rostand, filósofo, biólogo y escritor francés.