Ochenta embarcaciones navegan con la Virgen del Carmen en Celeiro

S. O. VIVEIRO/ LA VOZ

VIVEIRO

El Nuevo Cristo del Buen Viaje capitanea la procesión por la ría de Viveiro

28 jul 2019 . Actualizado a las 21:05 h.

Desde los muelles y desde otros lugares de la costa de Viveiro siguen cientos de personas la procesión marítima de Celeiro. Tras la estela del Nuevo Cristo del Buen Viaje navegan unas ochenta embarcaciones, doce de ellas «pincheiros» de Gran Sol y arrastreros de litoral, cinco cerqueros y más de sesenta de recreo, según la comisión organizadora. Especialmente engalanada luce la nave capitana, un «pincheiro» donde han habilitado un mimado altar para acoger a la Virgen del Carmen. Desde ese pesquero se ha lanzado en la bocana de la ría viveirense la corona de recuerdo a los fallecidos en el mar. Al regreso, frente a la playa de Covas, frente a su costado han desfilado los barcos, haciendo sonar sus bocinas al mismo tiempo que recibían la bendición. Y ahí, en medio de ese ritual, cantaron una emotiva «Madre, óyeme».

Además de armadores y tripulantes de los pesqueros y de sus invitados, y de los navegantes recreativos, al homenaje de Celeiro a la Reina de los Mares se han sumado varias autoridades. A bordo del Nuevo Cristo del Buen Viaje embarcaron la alcaldesa de Viveiro, la conselleira de Mar, la subdelegada del Gobierno en la provincia lucense, la directora autonómica de Pesca, el capitán marítimo provincial, mandos de la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Policía Local, concejales viveirenses... Por supuesto, también el patrón mayor de Celeiro y los presidentes de la sociedad de armadores Puerto de Celeiro y de la Organización de Productores Pesqueros de Celeiro, entre otros.

Luce el sol y los termómetros rondan los veinte grados en esta mañana del 28 de julio en Viveiro. Desde la lonja vieja de Celeiro, adonde fue bajada en la noche del sábado en procesión, la imagen del Carmen ha sido trasladada al Nuevo Cristo del Buen Viaje. Casi todas las embarcaciones que la acompañan la esperaban cuando soltó amarras alrededor de las diez y media de la mañana. Abandonaron la dársena celeirense y enfilaron hacia el exterior de la ría. Una nutrida flota que cada mes de julio desde hace 66 años convierte la ría viveirense en una pasarela de homenaje a la patrona de las gentes del mar. Pasaban las doce del mediodía cuando la nave capitana atracó en el muelle norte. Seguida por autoridades, vecinos y visitantes, fue llevada en procesión hasta el templo parroquial de Celeiro. La Banda TAU y la Banda Naval acompañaron un desfile que precedió a la misa del Carmen, cantada por Sons de Celeiro.

A la una de la tarde Charanga Mekánika tocará por las calles del puerto celeirense, uno de los referentes de la pesca gallega y europea. Y a las dos, con la Orquesta Los Trovadores, empezará la última sesión vermú de unas Festas Patronais e do Mar que empezaron el miércoles y que rematarán este lunes por la tarde, con el Diverneno. Pero este domingo, aparte de las comidas familiares en los hogares de Celeiro, aún queda diversión por delante: un nuevo pasacalles de la Mekánika a media tarde y, desde las diez de la noche, la última verbena, con Los Trovadores y Los Satélites.