Fallece a los 107 años el hombre más longevo de Galicia

El 31 de octubre, cuando cumplió los 107 años, con ese sentido del humor y lucidez que le caracterizaba, advertía: «108 son ben anos». Y su presagio se cumplió. Evaristo Fernández, el varón más longevo de Galicia, falleció la pasada madrugada en su casa de Ría de Abres, en el municipio lucense de Trabada (1.203 habitantes), tras no superar las secuelas de un ictus que sufrió el sábado. Murió rodeado de su familia, hijos, nietos y bisnietos. Un digno final para una vida espléndida, que le hizo merecedor del aprecio de sus vecinos y que ostentase hasta superar el siglo de vida el título de alcalde de barrio. «A verdade é que telo tanto tempo, e velo así, tan ben ata o final... foi un regalo», comentaba ayer su nieta Lucía. Y es que Evaristo pudo presumir hasta el final de no medicarse, tras dejar de tomar a los 106 años la única pastilla que le habían prescrito: un somnífero. Y también de comer de todo. 

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Evaristo fue uno de esos milagros que se dan de cuando en vez. A los 105 años sorprendía a todos por el vigor con el que desgranaba el maíz. Pero a los 106, en Navidad, una enfermedad le pasó factura y le volvió mucho más frágil. No obstante, siguió sin medicarse y comiendo de todo. 
Una vida tan larga da para mucho. Su esposa, Celedonia, falleció a los 97 años en el Hospital de Burela, el mismo día y a unos metros de donde nacía su bisnieto, Alexandre. Y un tío de Celedonia, Álvaro, sacerdote, murió a los 107 años. Ofició hasta ocho días antes de fallecer. Finalmente, Evaristo le ha superado en edad por algo más de dos meses.

Por su 106 cumpleaños, Evaristo compartió con La Voz los recuerdos de toda una vida centenaria. El reinado de Alfonso XIII, la dictadura de Primo de Rivera, la Segunda República, la Guerra Civil, el franquismo, la democracia, la proclamación del rey Juan Carlos...

¿El secreto de su longevidad? Así respondía el abuelo de Galicia.

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