El Concello de Ribadeo devolvió el radar camuflado que cazaba a los conductores que iban a más de 30 por hora al acceder al casco urbano

El tramo urbano de la avenida Ría de Ribadeo, entre la rotonda de Dompiñor y la del Voar, es la principal entrada al casco urbano ribadense y la que más tráfico acumula, con acceso desde la autovía del Cantábrico y por la localización de la zona comercial de Vilar, naves industriales y, entre otros, el Burger King. En Navidad, el alcalde, Fernando Suárez, anunciaba que la policía local iba a intensificar los controles de velocidad en varios puntos del casco urbano, con el vehículo y el material cedido por la Jefatura de Tráfico de Lugo, en virtud del convenio de colaboración que el Concello tiene firmado con este organismo. Uno de ellos fue la avenida Ría de Ribadeo. Fueron varias las multas que se pusieron en este lugar estratégico y, la noticia del radar camuflado rápidamente se extendió por Ribadeo con un efecto inmediato, pues a simple vista se comenzó a apreciar que los conductores ajustaban la velocidad de sus vehículos a los 30 kilómetros estipulados.

«Xa se devolveu o radar. Eran probas experimentais, e si, puxéronse algunhas denuncias. Pero é que nese tramo hai que ir a trinta por hora», manifestó el alcalde, Fernando Suárez. Y añadió: «Para máis adiante imos volver a solicitar o vehículo», aclarando que el hecho de que la policía local ya no haga los controles de velocidad no indica que Tráfico, por su cuenta, no los siga haciendo aleatoriamente en este acceso a Ribadeo.

Por otro lado, el alcalde ribadense avanzó que ahora lo que va a hacer la policía local es intensificar las campañas de controles de alcoholemia, con el equipo propio del que dispone: «Ata agora facíanse, de forma cíclica. Pero imos escomenzar outra vez. É unha boa medida. Sei que a ninguén lle gusta ser denunciado, pero a seguridade e cumprir a lei é o primeiro», concluyó Fernando Suárez.

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