Ribadeo expropia 30.000 metros cuadrados en As Catedrais para crear unas mil plazas de aparcamiento

J.A. RIBADEO / LA VOZ

RIBADEO

PEPA LOSADA

Ayer reunieron a los 14 propietarios y levantaron actas para ocupar los terrenos

27 nov 2021 . Actualizado a las 23:09 h.

El Concello de Ribadeo ha dado un paso decisivo en la puesta en marcha del plan especial de As Catedrais, la piedra angular para diseñar el futuro de uno de los principales iconos turísticos de Galicia, regulando un espacio de 56 hectáreas, desde el límite con el Concello de Barreiros hasta la playa de Esteiro y, por el norte, más allá de la línea de ferrocarril. En junio el Concello aprobó el inicio del procedimiento para expropiar 30.000 metros cuadrados, donde se construirá un gran aparcamiento, un centro de recepción y también se propondrá hacer un apeadero de Feve, entre otras infraestructuras.

El proyecto de expropiación fue remitido a la Xunta para que aprobase la urgente ocupación. Así lo hizo el Consello da Xunta hace un mes y ayer el Concello reunió a los 14 propietarios para realizar el levantamiento de actas previo a la ocupación de los terrenos. Así se delimitó, con estacas, la zona en la que se actuará. Ahora se propondrá pagar a los propietarios que, en caso de no estar de acuerdo con las cantidades, podrán recurrir. Pero el proceso de ocupación seguirá adelante. Lo que va a hacer ahora el Concello es concretar el proyecto de urbanización. Ahí se determinará el número exacto de plazas que se crearán. En el plan especial figuraban 1.300, pero podrían ser algunas menos ya que no se descarta que se incluyan otras infraestructuras. En todo caso, rondarán el millar.

El Concello ya incluirá en el presupuesto del próximo año una partida para acometer las obras, pero con el proyecto en la mano será el momento de recurrir a las administraciones y departamentos que avalaron el plan especial de As Catedrais, como Costas o la Deputación, con el compromiso de contribuir económicamente para regular este espacio. Y es que el plan en su conjunto preveía inversiones por valor de 2,5 millones (cantidad que no puede asumir el Concello), incluyendo demoler el restaurante que existe junto al acceso al arenal.