El cambio de balón alegra al Ourol

Iván Díaz Rolle
i. díaz rolle VIVEIRO / LA VOZ

OUROL

CEDIDA

El club mariñano acaricia el ascenso a Preferente apenas año y medio después de que una campaña horrenda les hiciera estudiar la disolución y cambiar el fútbol por el fútbol sala

22 may 2020 . Actualizado a las 16:28 h.

El salto del fútbol al fútbol sala ha sido mucho más que un cambio de balón y de superficie para la Sociedad Deportiva Ourol. La entidad mariñana, fundada en el 2002, llegó a plantearse la disolución en el 2018 tras una campaña horrenda en la que no consiguió ni una sola victoria y lo pasó mal para reunir once futbolistas cada domingo. Solo un año y medio después, todos los estamentos del club han recuperado la sonrisa gracias a su cambio de disciplina.

Cuando hace dos meses se pararon las ligas, la escuadra mariñana lideraba con autoridad su grupo de Primera Galicia y todo hace indicar que la Federación confirmará su ascenso a Preferente en los próximos días. El conjunto entrenado por Eduardo Lago, «Tito», ha acumulado 42 puntos en 16 partidos y es el más goleador (91) y el menos goleado (36) de la categoría. Aventaja en cinco puntos al segundo, el Vento-Teixeiro, y en 13 al tercero, el también mariñano Rececende Superti Pontenova.

El título de liga estaba ya muy cerca cuando estalló la crisis sanitaria. Los de Ourol han devorado etapas para adaptarse a un nuevo deporte en tiempo récord. En su primera campaña, pese a un inicio titubeante, ya hicieron un papel muy digno al terminar quintos. «Muchos de nuestros jugadores nunca habían estado federados y además nos costó arrancar porque jugamos al principio con casi todos los equipos de arriba», cuenta el tesorero de la entidad, Luis García.

Para el nuevo curso, los ourolenses ya se intuían candidatos: «Mantuvimos a casi todo el equipo e hicimos buenos fichajes con David Díaz o Dani Cobo. Y ya teníamos a otros buenos jugadores como Sanjurjo o Celes». No por ello deja de enorgullecerse el club mariñano por una trayectoria casi impoluta, con catorce triunfos y solo dos derrotas.

Descartada la vuelta de las competiciones, la resolución de los ascensos ya solo está en manos de la Federación. «Nos reunimos y lo único que tengo claro es que harán subgrupos en Preferente por si hay un rebrote. No nos dijeron nada, pero entiendo que a nosotros nos ascenderán. Y la otra plaza le correspondería al Vento-Teixeiro, pero todos los equipos deben aceptar jugar los dos partidos en la cárcel. Si no es así, el tercero es el Pontenova, pero el Mazaricos tiene dos puntos menos con dos partidos pendientes. Tienen una buena papeleta», resume García.

El cambio de disciplina

De confirmarse, la SD Ourol celebraría el segundo ascenso de su historia apenas un año y medio después del cambio de deporte. En el fútbol dieron el salto a Segunda Galicia en el 2017, pero en la siguiente campaña fue nefasta.

Eso precipitó una transformación que ha demostrado ser efectiva al menos en el terreno deportivo. En un curso y medio han conseguido las mismas victorias y marcado más goles que en las últimas cinco campañas federados en el fútbol autonómico.

«Era reinventarse o morir», subraya Luis García que esgrime otros motivos importantes: «En Viveiro siempre hubo mucho fútbol sala y lleva unos cuantos años sin equipo. Además es más fácil hacer una plantilla de 12 jugadores que una de 25, y también es más cómodo venir al pabellón de Ourol, que impecable. Jugábamos en Galdo, entraba el jabalí, tienes que cortar el césped...».

En año y medio ha ganado (28) y marcado (181) más que en cinco campañas de fútbol

Fundado en 2002 como club de fútbol, en el 2018 se pasó al fútbol sala para no desaparecer