El choque de la A-8 ocurrió fuera de la zona donde se instalaron las balizas antiniebla

MONDOÑEDO

Accidente en O Fiouco, el pasado sábado
Accidente en O Fiouco, el pasado sábado XAIME RAMALLAL

El Gobierno admite de esta forma que el suceso ocurrió, y que el riesgo de incidente existe, en una parte de la infraestructura más amplia que aquella donde se centró la intervención

24 ago 2024 . Actualizado a las 13:35 h.

El Gobierno de España respondió este lunes después del choque múltiple ocurrido el pasado sábado, en una jornada de intensa niebla, en la Autovía del Cantábrico a la altura de Argomoso (Mondoñedo). Fuentes del Ejecutivo central desvinculan el accidente de tráfico de las medidas de seguridad vial adoptadas en la A-8 para combatir la bruma en el alto de O Fiouco, ya que el siniestro ocurrió «en dirección Lugo y antes de la zona de las balizas inteligentes instaladas por la DGT». La Administración estatal admite de esta forma que el suceso ocurrió —y que el riesgo de incidente existe— en una parte de la infraestructura más amplia que aquella donde se centró la intervención para favorecer la conducción con poca visibilidad.

Consultado sobre las causas del accidente, el Gobierno afirma que la investigación de la Guardia Civil todavía no ha concluido. Sí concreta que a la luz de un primer atestado se registraron dos alcances, un primer choque con seis coches involucrados y sin afectados, y una segunda colisión entre tres vehículos con tres heridos leves y uno grave. «Con una situación heredada, hemos entendido desde el primer momento la dificultad en la circulación que supone este tramo de la autovía y continuamos poniendo todos los medios al alcance para evitar que se produzcan accidentes, pidiendo también precaución a los conductores», señala el Ejecutivo. El PP reclamará explicaciones en el Senado sobre la «falta de seguridade» en la infraestructura y urge a «implantar as medidas prometidas».

El siniestro del pasado sábado ocurrió entre los kilómetros 544 y 545 de la A-8. Entre los hitos 545,400 y 549,680, en ambos sentidos de la circulación y en ambos márgenes de la vía, se instaló en enero del 2022 un sistema de balizas inteligentes que ha permitido reducir significativamente las horas de cierre de la autovía, de 1.772 entre septiembre del 2014 y diciembre del 2016 a 14 en todo el ejercicio 2023.

En ese tramo de la Autovía del Cantábrico, el Gobierno dispuso un total de 372 balizas inteligentes, levantadas sobre postes de 1,5 metros y que cuentan con luces LED. Se agrupan en ciclos de tres con un funcionamiento conjunto, de modo que detectan la presencia o la salida de vehículos dentro del espacio en el que está dispuesto cada trío. Además de dotar de mayor luminosidad a la carretera, advierten con el color rojo al conductor de que hay un vehículo precedente a unos cien metros, para mantener la distancia de seguridad.

Tras más de 6,5 millones de inversión, el sistema antiniebla definitivo está en redacción

No es fácil concretar lo que ha costado al erario público combatir la niebla desde el primer choque múltiple —con una víctima mortal— en la A-8, en julio del 2014. Como mínimo, la Administración ha invertido 6,5 millones, aun cuando el proyecto elegido para resolver los problemas de seguridad vial está en redacción, y no hay concreción sobre su presupuesto.

El Gobierno ha optado por un proyecto de balizamiento láser, complementario a las balizas inteligentes y que delimitará la vía. Fue el ganador de un proceso de compra pública comercial, que sirvió para estudiar varias propuestas y que fue adjudicado por 5,64 millones. Las balizas antiniebla instaladas en el 2022 costaron 873.000 euros.

Entre el accidente del 2014 y el año 2019, se instaló un desvío automático a la N-634. Además, cuatro kilómetros de balizas tipo LED empotradas en pavimento, seis pórticos de señalización variable y tres nuevas estaciones meteorológicas, doce carteles y 50 señales verticales, además de cinco cámaras de circuito cerrado, que se sumaron a los recursos previos.

¿Cuánto costaron las horas de cortes de vía a los usuarios? Antes de la instalación de las balizas, la Secretaria de Ciencia e Innovación y la Dirección General de Carreteras cifraban este sobrecoste en tres millones de euros anuales —entre el mayor número de kilómetros recorridos por los coches al ser desviados a la N-634 o el impacto ambiental—.