Evita entrar en prisión tras admitir que pretendía traficar con 4.500 euros en cocaína en Mondoñedo

André Siso Zapata
André S. Zapata LUGO / LA VOZ

MONDOÑEDO

El acusado de traficar con cocaína en Mondoñedo evitará entrar en prisión.
El acusado de traficar con cocaína en Mondoñedo evitará entrar en prisión. A. SISO

Un acuerdo de conformidad entre la defensa y la Fiscalía redujo la multa y permitió la suspensión de la pena

03 may 2022 . Actualizado a las 18:38 h.

Un acuerdo de conformidad entre la Fiscalía y la defensa propició la suspensión de la pena de un vecino de Mondoñedo, acusado de tráfico de cocaína. Finalmente, aceptó una condena de cuatro años de cárcel y una sanción de 4.473,80 euros. El juicio tuvo lugar en la Audiencia Provincial de Lugo en la mañana de este martes, pero el proceso comenzó hace ya más de dos años. 

Según el escrito de acusación de la Fiscalía, una patrulla observó como el acusado, el día 1 de abril del año 2020, acudió a una cita previamente concertada con otro hombre. Se encontraron en el punto kilométrico 3 de la carretera LU-121. En ese momento, según el fiscal, «el acusado le vendió al otro sujeto una papelina que contenía 0,513 gramos de cocaína, con una riqueza del 86,66 %, y un valor en el mercado ilícito de sustancias estupefacientes de 59,74 euros». Esta transacción fue la que destapó una posesión de drogas mucho mayor.

Registro clave en su domicilio

Tras ser interceptado por los agentes en el momento del trato, aceptó voluntariamente un registro en su domicilio, ubicado en Mondoñedo. Allí, los agentes encontraron 38,80 gramos de cocaína, con una pureza de entre el 84 y el 86 %, y cuyo valor en el mercado ilícito alcanzaba los 4.422 euros

«Igualmente, le fueron intervenidos al acusado 1.045 euros procedentes del tráfico ilícito de sustancias estupefacientes», termina el fiscal el relato de los hechos. 

En un principio, se pedía para él una pena de cuatro años de prisión y una multa de 13.600 euros, el triple de lo requisado. Tras el acuerdo de conformidad, la multa bajó hasta los 4.473 euros.

Su defensa solicitó la suspensión de la pena, que se mantuvo en cuatro años, alegando que su cliente era consumidor habitual en aquel momento y que la adicción que sufría fue el móvil del delito. El fiscal, tras el acuerdo, no se opondrá a la suspensión, por lo que el ya condenado no entrará en prisión.