Daniel Castro, representante de A Mariña en «Recantos» de Luar: «Mi abuela, de Mondoñedo que vive en los Andes, se puso muy contenta»

Su historia personal y vital tiene un símil con la trayectoria de un boomerang: es de ida y vuelta. Aunque nació en Venezuela, los abuelos de Daniel Castro (Dan Ale) son de Mondoñedo. Al otro lado del charco vive su abuela, ilusionada porque su nieto volvió a las raíces gallegas familiares y lo hace, ahora, representando a A Mariña en el concurso «Recantos» del más que veteranísimo programa Luar de la TVG, que ha alcanzado su temporada número 30 (por comparar, Saber y Ganar tiene 24) y conduce Gayoso. Él se presenta: «Multifacético chico lleno de carisma, chispa, talento, dedicación y sobre todo compromiso con la música».

-¿En qué trabaja actualmente?

-Soy profesor de baile latino [formó parte de varias empresas de entretenimiento en su Venezuela natal, como bailarín y coreógrafo], pero ahora trabajo en un salón de apuestas deportivas, en Cangas do Morrazo. Con el tema de la pandemia y los aforos, tuve que cancelar las clases. Estuve un tiempo en Mondoñedo y luego me vine a Vigo, porque me llamaran para darlas en Afundación, en García Barboa. Por eso me trasladé. Estuve dos años dando clases a la gente mayor.

-¿Por qué representa A Mariña?

-Soy de abuelos gallegos, de Mondoñedo. Cuando llegué a Galicia hace cinco años estuve viviendo allí un par de meses, solamente. Con el parón del tema de las orquestas [ha sido cantante del trío Armonía de Baiona y la Orquesta Ritmo Noche] y de las clases de baile, metí currículum y el trabajo me salió en Vigo.

-Ese sector de la música y el baile sufre mucho la pandemia.

-¡Muchísimo! De un día al siguiente quedé sin nada. Aparte, tenía contratos fijos discontinuos, me daban de alta, me daban de baja... y al final no me correspondía nada, ni ayudas. ¡Nada! Lo pasé mal. Mis alumnas me ayudaron y fue un año un poco fuerte. Para todo el mundo. Me costó conseguir empleo, porque con la pandemia estaba todo inanimado y no querían arriesgarse a contratar a nadie. Al final, conseguí empleo en Cangas do Morrazo pero tengo paralizado el tema de los grupos y de las orquestas porque necesito comer pero ese sector aún está inestable: que comienza, que no comienza... Por eso, decidí dejarlo. Vi la publicidad del concurso en la televisión gallega, mandé un vídeo con un par de temas, pasaron los días y al final me llamó una chica. Y empecé a contarle que estoy en Cangas pero mis abuelos son de Mondoñedo, de ahí que caigo como representante de A Mariña. No podía representar ni Vigo ni Pontevedra, porque ya había. Y me quedé con A Mariña, casualmente. Me vino como anillo al dedo. Estoy súpercontento. Mi abuelo (José Antonio Castro) murió, pero mi abuela vive en los Andes de Venezuela y cuando se le comenté se puso contenta. Me dijo: ‘Ay Dios mío! Es el destino, el mundo es un pañuelo!'. Siempre hablo con ella y me da mucha buena vibración. Se llama María Albina. Marchó por el año 36, en la Guerra Civil, según me cuenta. Mi madre ya es nacida en Venezuela.

-¿Hasta dónde quiere llegar en el concurso «Recantos»?

-Todos los concursantes queremos quedar en una buena posición. Tengo buenas expectativas. Esperemos que todo marche bien. Quiero darle una sacudida al concurso. Tengo una carta que es que, con el tema del baile, ya me dijeron en producción que me iban a poner algo movido.

-¿Cuándo va a ser su primera actuación televisiva en el mismo?

-El 5 de noviembre, en la primera fase. Cuando fue la presentación de los «Recantos» de este año, fui de primero pero para comenzar las actuaciones hicieron el orden a la inversa, comenzando por Vigo. Y quedé de último.

-¿Cuál es su estilo musical, en el que se siente más cómodo?

-Me gustan las rancheras, las baladas y la música pop. No escogemos nosotros los temas, por eso estamos ‘asustadísimos'. Es la canción que me asignen y, aparte, cantarla en gallego.... Tengo a la guionista y al director pensando ‘a ver que sale de aquí' (sonríe).

-¿Tiene familia en Mondoñedo?

-No, pero casualmente mi madre llega de Venezuela el viernes. Quiero llevarla a conocer esa zona. Ella quería ir a la casa donde vivieron mis abuelos...

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