El acusado de arrancarle el dedo de un mordisco a un joven de Foz: «Me sacó un cuchillo y me tiró al suelo, yo solo me defendí»

FOZ

La Fiscalía pide cinco años de prisión para el hombre, con antecedentes penales por otras agresiones
17 jun 2025 . Actualizado a las 17:47 h.La Fiscalía de Mondoñedo solicita una pena de cinco años de prisión para un vecino de Foz acusado de causar lesiones graves a otro hombre durante una pelea ocurrida en la madrugada del 13 de agosto del 2022, a las puertas del restaurante A Soalta, en las inmediaciones de una discoteca. El juicio se celebró este martes en la Audiencia Provincial de Lugo y el procesado, que se enfrenta a una importante pena de prisión debido a sus antecedentes, se justificó alegando defensa propia.
Según el relato del Ministerio Público, el acusado se encontró en la vía pública con el perjudicado, con quien ya existían «desavenencias previas». Ambos se enzarzaron hasta en tres ocasiones, siendo separados en las dos primeras por amigos. Durante el tercer enfrentamiento, el acusado mordió el dedo índice de la mano izquierda del denunciante con tal violencia que le arrancó la primera falange, actuando —según sostiene la fiscal— «con la intención de dañar gravemente su integridad física».
Como consecuencia de la agresión, el perjudicado sufrió un traumatismo craneal sin pérdida de conocimiento y la amputación parcial del dedo, lo que requirió intervención quirúrgica para confeccionar un muñón, así como tratamiento médico a base de analgésicos, antibióticos y curas.
El acusado ya había sido condenado anteriormente por delitos de lesiones, por lo que la Fiscalía solicita que se aplique la agravante de reincidencia. Una de las condenas, de cinco meses de prisión, estaba pendiente de cumplimiento en el momento de los hechos. Además de la pena privativa de libertad, la Fiscalía solicita que el acusado indemnice al perjudicado con 8.000 euros por las lesiones sufridas, y al Sergas con 1.244,95 euros por el coste de la atención médica prestada.
«Cuando vi que se llevó la mano al cuchillo, le mordí la mano. Lo hice para defenderme»
En la vista del juicio, el procesado defendió su inocencia. No negó haber mordido al otro joven, pero sí que iniciase él el conflicto. «Nos encontramos varias veces esa noche. Él se me acercó y me enseñó el cuchillo. A la tercera vez que nos vimos, fuera de la discoteca, vino hacía mí, me puso la mano en la cara y me tiró el suelo. Cuando vi que se llevó la mano al cuchillo, le mordí la mano. Lo hice para defenderme. Solo me defendí —insistió—. Entonces nos separaron unos amigos y él se fue», se justificó.
Alegó que no supo que el afectado había perdido el dedo hasta tiempo después. «Allí nadie se enteró, porque nadie dijo nada», indicó. Añadió, además, que estaba bebido y que no fue consciente en el momento de lo que había pasado exactamente. Finalmente, recordó que el denunciante había tenido un orden de alejamiento de él. «Me había atacado más veces, teníamos muy mala relación», concluyó.
La víctima, que también intervino en el juicio como testigo, dio una versión contraria, diciendo que estaba solo y que fue el acusado el que le atacó en primer lugar cuando salía del restaurante donde trabajaba para echar la basura. Según declaró, recibió patadas en la cabeza que lo dejaron «mareado» y fue sujetado por los familiares del acusado.