La familia, con vecinos y Guardia Civil, peinan la zona tras 12 días de la desaparición de la sexagenaria de Foz
16 oct 2021 . Actualizado a las 13:59 h.Con el paso de los días se pierde parte de la esperanza, pero pesa la responsabilidad de hacer hasta el último esfuerzo por encontrar a Maruja, que falta de su casa de Morgallón, en Fazouro (Foz), desde hace doce días. Parientes y también vecinos de la zona no dan por finalizada al 100 % la búsqueda, que la Guardia Civil continúa con batidas periódicas, explica la familia.
Conscientes del tiempo que ha pasado y de que trabajan con menos medios, siguen adelante y agradecen a la ciudadanía cualquier pista o detalle sobre M.J.C.R., de 69 años y que padece Alzhéimer.
«Temos case a plena seguridade de que ela volveu a saír do camiño polo que se meteu aquel domingo, e que puido tomar calquera dirección. Nós seguimos buscando, pensamos que Maruja pode estar en calquera parte das parroquias de Fazouro ou de Nois, por proximidade». Así lo manifestaba este jueves un portavoz de la familia que, como otros efectivos, ha realizado en varias ocasiones el recorrido que supuestamente hizo la sexagenaria aquel domingo. Incluso simulando el paso de ella y observando con detenimiento a ambos lados del vial por si pudiera aparecer alguna pista nueva. Si eso sucediera, el operativo se reforzaría.
También se llevó a esa zona a un perro que Maruja había criado y con el que vivía, por ver si el animal seguía algún rastro. «Soltouse o can alí, pero nada», explican familiares, que aseguran que también se trasladó para rastrear el entorno al perro de un vecino que también la conocía.
Tras la falta de avances e intentando explorar nuevas vías en la búsqueda, incluso la familia habló en días pasados con agentes de la Guardia Civil para saber si consideraban oportuno contactar con el neurólogo que la trataba por si el especialista pudiera ayudar a interpretar qué pudo pasar por la cabeza de Maruja aquella tarde, un día después de estar con una de sus hijas en la entrada del referido camino.
«Ela, aínda que xa desaparecera algunha vez, volvía sempre. Ía aos sitios e volvía, salvo contadas ocasións», reiteran familiares, que agradecen cualquier información que pueda arrojar luz sobre el caso y que, nuevamente, aplauden la entrega y colaboración de todos los efectivos y voluntarios que participaron en la búsqueda de Maruja da Casareta, como es conocida por ser ese el nombre del lugar o casa en la que residía con su esposo y una hija.
«Volveremos ás mesmas zonas e entendo que iremos por outros lados. Nunca descartamos que, si desandou o camiño cara ao monte, puidera despois tomar carreteras hacia Nois ou Cangas», explican. Lo que más les llama la atención es que nadie se cruzara con ella y de ser así, no se sorprendieran al verla medio desnuda, ya que en el camino se encontró al menos un pantalón y un pañal.
En la búsqueda participaron desde el domingo 3 y durante días equipos de la Guardia Civil (también buzos del GEAS), Policía Local, GES de Cervo, Protección Civil, bomberos, perros de la Asociación de Cans de Salvamento de Galicia (Casaga), vecinos, voluntarios, cazadores, helicóptero, drones, trabajadores municipales... Se ha peinado una importante superficie en tierra y se ha rastreado el río Ouro y también la zona costera.