Los 40 ancianos y los 28 trabajadores del centro llevan las medallas que les dibujó un niño de Santiago de 5 años
31 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Antonio tiene 5 años y vive en el centro histórico de Santiago de Compostela, cerca de la Catedral. Cuando dejó de ir al cole debido al confinamiento por el coronavirus, sus padres le explicaron lo que ocurría y el decidió dibujar «escudos» para proteger a su mamá, a su papá, a su hermano Martín y al resto de su familia. Días después, cuando se enteró que Fátima, que es amiga de su mamá, estaba muy preocupada por los ancianos de la residencia que dirige en Foz, decidió preparar también para ellos los escudos. Y son estas medallas las que llevan desde hace días los 40 ancianos y los 28 trabajadores del centro focense, como explicó este sábado su directora, Fátima Fernández Gómez.
La energía positiva es más necesaria que nunca en este momento, y de ahí que la iniciativa haya tenido una acogida tan buena. Hasta el punto de que la narradora Soledad Felloza ha decidido darle forma de cuento: un relato corto, pero precioso que circula por las redes sociales y reconforta el espíritu de quienes lo leen estos días.