La fachada litoral, desde el puerto hasta A Rapadoira e incluso Llas, es la más castigada por las pintadas, cuya cifra se disparó en las últimas semanas
21 ene 2019 . Actualizado a las 20:49 h.La fachada marítima de la villa focense parece haberse convertido en el lienzo preferido de los grafiteros. A lo largo de poco más de un kilómetro, y al son de la línea de costa, se pueden ver más de una docena de pintadas en edificios públicos, como el Cenima, y en fachadas, muros, viviendas y edificios particulares. Estampan grafitis hasta en soportes municipales en los que se ofrece información sobre la playa de A Rapadoira y donde se cuelgan avisos.
Los vecinos y los visitantes que habitualmente pasean por la zona constatan que las pintadas van a más. Y desde el Concello tienen conocimiento de que el último mes ha sido especialmente activa la acción de los grafiteros. Los hay que poco más que garabatean mientras que otros se deleitan ilustrando y dejan plasmada su firma y fecha.
«Neste último mes nótase máis actividade nesa zona especialmente. Desde o Concello estamos investigando esa actividade. Xa advertimos que no momento en que se dea cos autores desas pintadas, éstos serán sancionados. Non se poden consentir certas prácticas, nen no patrimonio público nen tampouco en propiedades privadas dos veciños, e máxime cando saben que o están facendo sin autorización», explicó el regidor, Javier Jorge Castiñeira, que recuerda que el Concello cuenta con una ordenanza de limpieza urbana que contempla sanciones económicas por este tipo de ataques. El regidor reconoce que, por las pesquisas ya realizadas, en el Concello manejan algún dato sobre la autoría de estas pintadas, que se reparten principalmente entre el puerto pesquero y la playa de A Rapadoira, aunque es fácil encontrar grafitis en el tramo hacia Llas. Otro punto donde han aumentado notablemente es en la zona del área recreativa de A Pampillosa, en Fazouro.
Espacio controlado
Jorge Castiñeira asegura que desde el Concello nunca se cerraron en banda para habilitar un muro para realizar grafitis, pero en una zona concreta y de forma controlada.
El Concello investiga para dar con los autores de los grafitis en propiedades públicas y privadas