La fallecida al caer su coche en un acantilado en Tapia era trabajadora municipal y vivía en San Cibrao

La Voz TAPIA/LA VOZ

CERVO

CEDIDA

El Ayuntamiento estuvo pendiente durante toda la mañana de la confirmación de su identidad y valora decretar luto

03 ago 2020 . Actualizado a las 13:26 h.

Desde el Concello de Cervo han tenido conocimiento este mediodía de que el cadáver que apareció flotando en el acantilado de Los Castros en Tapia a primeras horas de la mañana, junto a un coche ardiendo, era el de una trabajadora municipal, empleada del servicio de ayuda a domicilio desde hace al menos veinte años, según indicaron. El Ayuntamiento, añadieron desde el mismo, se valoraba a estas horas el decreto de luto en el municipio por el fallecimiento de la mujer cervense, asturiana de nacimiento, de 51 años de edad y residente en San Cibrao, según indicaron las fuentes consultadas.

Servicios de Emergencias del Principado de Asturias recibían esta mañana el aviso de una humareda que se percibía en los acantilados de Los Castros, cerca de la playa de Serantes en Tapia de Casariego. Una vez allí, los efectivos que se desplazaron comprobaron que el humo procedía de un coche que estaba ardiendo en la zona rocosa, a unos 15 metros más abajo, pero que no había llegado a caer al mar. En el agua, sin embargo, se encontró flotando, según señalaron fuentes consultadas, el cuerpo sin vida de una persona, presumiblemente la conductora del vehículo siniestrado, el cual tenía, además, una de sus puertas abiertas. En el lugar del suceso se personaron agentes de la Guardia Civil y de Tráfico, bomberos de la estación de Barres y la Policía Judicial de Luarca, entre otros, según señalaron fuentes consultadas.

Cerca del mediodía se estaba aún pendiente del levantamiento del cadáver, que fue sacado del agua con ayuda de un bombero que se lanzó al mar y el helicóptero de la Morgal que lo llevó a tierra con una grúa, según indicaron a este periódico fuentes oficiales.