Las familias lo decidieron en asamblea, tras supervisar el estado del colegio en obras
17 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Padres y madres de alumnos del CEIP de Cervo acordaron este lunes por la tarde en el transcurso de una reunión que enviarán a clase a sus hijos e hijas este miércoles. Para la gran mayoría de los estudiantes matriculados en el centro (en torno a 130), el 18 será su primer día de clase, justo una semana después del inicio oficial del curso escolar. Las familias decidieron no enviarlos antes de esa fecha por el retraso que acumulaban las obras de remodelación que continúan en el centro educativo y cuyo presupuesto ronda los 816.000 euros.
Un grupo de padres y madres visitaron ayer el colegio a las 9.30 horas para supervisar las obras y comprobaron que durante el fin de semana habían avanzado bastante los trabajos. Antes de entrar, leyeron el siguiente escrito: «Estamos aquí unha vez máis para comprobar persoalmente o estado das instalacións do colexio, xa que a consellería non deu resposta ó noso escrito entregado o pasado martes 10 de setembro, no que solicitabamos un encontro para atopar unha solución para as nosas fillas e fillos. Seguimos á espera dunha resposta e reiteramos a nosa disposición ao diálogo. Por outra banda, queremos deixar constancia que as declaracións na prensa tachando ás familias de marionetas da oposición aumentaron, si cabe, esta impotencia, este sentimento de frustración provocado pola falta de apoio e resposta por parte das institucións. Somos nais e pais do colexio de Cervo, sen máis etiquetas, as que nos preocupamos por informarnos e despois comunicar esa información, antes que ningún partido ou sigla. O único que nos move é a preocupación pola seguridade e integridade das nosas fillas e fillos».
Ayer por la tarde se celebró la reunión prevista en dependencias municipales. Acudieron un número importante de progenitores y se plantearon cuestiones y dudas. Finalmente, acordaron de forma mayoritaria enviar a clase mañana a sus hijos. «Vimos que puxeron todos os baños, limparon bastante e avanzaron bastante no interior, nas instalacións eléctricas e tamén nas ventás», reconocían ayer asistentes a la reunión. No obstante, las familias no bajarán la guardia y seguirán vigilantes para ver cómo se desarrollan las obras y velando porque se garantice la seguridad de los menores. Algunos de ellos ya se quedaron ayer en el colegio y otros empezarán hoy, pero la gran mayoría iniciarán mañana el curso. También desde el BNG recordaron que seguirán vigilantes supervisando cómo avanzan los trabajos.