Un viaje al San Cibrao de 1961 en Super-8

La Voz

CERVO

CEDIDA POR LORETO SAMPEDRO MARTÍN

Hoy se proyecta en DVD la película «Casados coa historia dun pobo» grabado por la boda de Paco y Maribel

10 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Hoy?•?19.00 horas?•?Casa da Cultura?•?El Super-8 es un formato cinematográfico antiguo que utilizaba películas de ocho milímetros de ancho y que aún ciertos nostálgicos del mundo audiovisual utilizan. Destronado por el vídeo, fue el modo en el que un invitado grabó la boda celebrada un 17 de septiembre de 1961 entre Paco Sampedro, cuya madre (Ursulina) vivía en San Cibrao (Cervo) desde los cinco años, y Maribel Martín. No se conoce el nombre del autor pero aquella grabación fue recuperada tiempo después por el entonces novio y aprovechó la cesión para hacer una copia. Pasada a DVD, la película «Casados coa historia dun pobo» se proyectará hoy en la localidad donde fue grabada hace 57 años, cinta en la que se ve cómo era el pueblo en los 60 y al final de todo Maribel de novia, Paco también, los invitados, la llegada a la iglesia...

Ellos tuvieron tres hijos: Loreto y Patricia que viven en Oviedo y Fran, residente en Tenerife. Las hermanas estarán hoy en el acto, de lo más emotivo para ellas pues su padre falleció hace un año aproximadamente (su madre hace 11). Es, además, una cinta que a Loreto, explica, le gusta ver con su hija al volver de vacaciones de San Cibrao cada agosto y de la que un buen día habló a Evaristo Pernas y a Javier Lamelas, que no dudaron en animarla para que se proyectase públicamente en San Cibrao, donde la familia ha veraneado prácticamente toda la vida.

«Visión del pueblo»

«Mi padre tenía un gran amor por San Cibrao y este acto es como un homenaje a él. Son imágenes inéditas de esa época pero para mí tiene un significado muy especial», declara Loreto emocionada. «El señor que lo grabó ?añade? debe ser que le gustó San Ciprián. La película está grabada con mucha continuidad y está muy enfocado el pueblo: el faro, la playa... Es una visión de todo el pueblo». «No sé el nombre del autor. Le pregunté al hermano de mi padre, de 92 años, pero no se acuerda. Solo sabe que falleció el año pasado también», dijo.