Previo al Equinoccio

CERVO

25 mar 2016 . Actualizado a las 00:11 h.

Resulta interesante repasar el santoral. Llamo la atención de tres santos varones: Lázaro, José y Martiño. Los tres muy celebrados en nuestra hermosa Britonia que comienza a cambiar el color del horizonte dónde se juntan mar y cielo. Los grises plomizos dan paso a los nuevos azules.

En el 2004, por el Xacobeo, se publica El Hospital real y la hospitalidad. Miguel Ángel González García le dedica una feliz reflexión a Enfermedades de aquí, y médicos del más allá. Señala que religión y salud han estado íntimamente relacionadas, hasta el punto que una sexta parte del Evangelio de Marcos está dedicada a relatar la actividad sanante de Jesús. Refiere como se acude a los médicos del más allá para que iluminen a sus colegas de aquí, y así cada especialidad celebra su efeméride. Pero también se hace uso de exvotos, oraciones y conjuros. Casi se atreve  a determinar los parámetros de la clínica de lo sobrenatural. 

San Lázaro. Sanador y defensor frente a esa enfermedad bíblica que era la lepra. Jinete del Apocalipsis de San Juan, junto a la peste y que asolaban oriente y occidente en la Edad Media. De ahí provienen la presencia de los lazaretos, como lugares para aislar la fuente del contagio. Viveiro y Mondoñedo, tuvieron hospederías hospitalarias dedicadas a tal fin.     

San Martiño Dumiense, que llega a Galicia en el 550 y nos deja su De correctione rusticorum. Se enfrenta con los cultos ígneos, hídricos y líticos, con escaso resultado si repasamos Supersticiones de Galicia, del médico lucense Jesús Rodríguez Lopez, a cuya quinta edición le dedica un prólogo nuestro querido Presidente de la RAG, don Xesús Alonso Montero. 

Por fin San José. Poco podían imaginarse aquellos cristianos viejos que se invocaría para dar forma al «día del padre», por obra y gracia de «yankilandia», y que el asturiano Pepín Fernández traslada como estrategia para vender regalos en Galerías Preciados. San José es patrono de los Seminarios, y  de carpinteros de rivera, artesanos constructores de buques y mascarones de proa ?luego imagineros de Semana Santa?, en los cuatro astilleros de la ría dónde el Covo permitía una frenética actividad portuaria cuando éramos el Puerto de las Reales Fábricas de Sargadelos-Islas San Cyprianus- 

Bienvenida sea la primavera pasando por las efemérides previas que se citan.