El Pescados Rubén cerró su triplete en tiempos de pandemia con la Supercopa en casa ante un combativo Poio Pescamar
09 ene 2021 . Actualizado a las 14:05 h.Las superheroínas que ilusionan a Burela incluso en los convulsos tiempos de covid volvieron a hacer honor a su fama. El Pescados Rubén Burela cerró el triplete de la pandemia en casa, con 200 animosos aficionados en la grada del Vista Alegre, en otra fiesta gallega ante un Poio Pescamar combativo, pero con el que marcó importantes diferencias en la cancha. El equipo de Julio Delgado conquistó la Liga en Málaga, la Copa de la Reina en la misma sede y también contra las pontevedresas, y solo 19 días después la Supercopa en Burela. Las cada vez más legendarias Guerreiras Laranxas acumulan seis coronas consecutivas desde junio del 2019, y en total ya tienen tres Supercopas, tres Ligas y tres Copas.
El cuadro pontevedrés entró muy metido al partido e incluso dispuso de una ocasión inmejorable ya a los 40 segundos en los pies de Dani Sousa tras una transición de Luci y un buen pase de Irene García. Jozi estuvo gigante para frenar a su compatriota brasileña en el segundo palo. Esas salidas con espacio fueron la mejor arma del conjunto de Manu Cossío en una primera mitad en la que el Burela tuvo un dominio evidente de la pelota.
Aunque ante un rival bien plantado y dispuesto a pelear cada acción le costó generar oportunidades, el tempranero gol de Peque reforzó a las mariñanas en su idea de mover la pelota con paciencia e inteligencia. La madrileña estrenó el marcador cuando solo habían transcurrido siete minutos en un inesperado chut pegado al palo desde fuera del área, rodeada de enemigas. Ya antes Silvia Aguete había taponado bien ante Dany en una recuperación de la 7, y Ale de Paz la había exigido en un tiro cerca de la escuadra.
La portera pontevedresa mantuvo a las suyas en el partido con varias paradas en los momentos más críticos. Especialmente meritorias fueros otras dos intervenciones ante Dany, asistida primero por Peque y luego por Leti Cortés en un pase desde propio campo. En el enésimo robo y carrera de Cami, Aguete incluso tocó la última ocasión de la pívot brasileña en el primer tiempo, pero la pelota entró a gol lastimosamente. En esos últimos instantes previos al descanso, Elena Aragón mandó un doble penalti al limbo y Bea Mateos estrelló la pelota en el palo en otra transición de Cami y pase de Peque al segundo palo.
Con 2-0 en contra, el Poio dio un paso al frente en la continuación, pero su ilusión duró lo que tardó el Burela en volver a encadenar posesiones largas. Al final, la arquera Caridad García fue la más decisiva de las suyas en el segundo acto, con buenas paradas ante Cris Pérez o Dany, y la MVP Peque volvió a enviar un balón al poste. Ni siquiera con portero-jugador durante más de cuatro minutos incomodó un equipo que se despidió orgulloso de volver a dar la cara en una final.
Ficha técnica:
P. Rubén Burela, 2: Jozi; Cami, Leti Martín, Peque y Cris Pérez -cinco de inicio-, y Cilene, Dany, Bea Mateos, Ale de Paz, Elena Aragón.
Poio Pescamar, 0: Silvia Aguete; Irene García, Luci, Ana Rivera y Dani Sousa -quinteto-, y Antía, Clara, Miriam, Julia, Agostina Chiesa, Carol y Caridad.
Goles: 1-0, min. 7: Peque. 2-0, min. 19: Dany.
Árbitros: Carreira Romero y Ferreira Carballal. Mostraron la cartulina amarilla a Clara, por el Poio
Incidencias: 200 espectadores en el Vista Alegre.