Ence invertirá 60 millones y creará 110 empleos en Navia en un proyecto de descarbonización
A MARIÑA
La papelera impulsa «Navia Excelente», un plan con el que pretende utilizar la lignina de la madera para reemplazar los combustibles fósiles
17 nov 2022 . Actualizado a las 18:12 h.Ence invertirá 60 millones en su planta de Navia para avanzar en su plan de descarbonización. Dentro del proyecto «Navia Excelente», la papelera impulsará el uso de la lignina, un polímero que está presente en la madera, como sustituto de los combustibles fósiles en los hornos de cal. También tiene previsto utilizar ese material en productos de valor añadido y la previsión es que estas novedades supongan la creación de 110 empleos entre directos e indirectos.
Los planes de la compañía no tienen plazos concretos pero el horizonte que manejan es 2027. Para esa fecha, Ence espera haber culminado «Navia Excelente», un proyecto que combina varias líneas de actuación dentro de los planes de «crecimiento, diversificación y eficiencia» de la empresa. Una de ellas se centra en la descarbonización de las instalaciones. Su intención es sacar mayor rendimiento a la lignina, un polímero que forma parte de la pared celular del tejido vascular de las plantas. Actualmente, esa lignina ya se usa en la planta de Navia, pero Ence considera que es un producto con muchas potencialidades.
La lignina, que actualmente se utiliza energéticamente en Navia para generar energía renovable, será «la fuente de energía de nuevas partes del proceso de producción de la celulosa», explican desde la empresa. El objetivo es que sustituya a otros combustibles no renovables que se usan actualmente, como el fuel o el gas. Ence señala que este proyecto de descarbonización supondrá «una reducción del 70% de las emisiones de CO2 anuales procedentes del uso de combustibles fósiles».
La papelera detalla que el proyecto «lleva vinculada la creación de cerca de 110 empleos directos, indirectos e inducidos».
Un beneficio de 67 millones en lo que va de año
Ence-Energía y Celulosa registró un beneficio neto atribuido de 67 millones de euros en los nueve primeros meses, frente a las pérdidas de 193,1 millones del mismo periodo del ejercicio precedente, según ha informado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En el tercer trimestre, la compañía obtuvo un beneficio de 22 millones, frente a los 2 millones contabilizados en el mismo periodo de 2021, a pesar de la suspensión temporal de la actividad en su biofábrica de Pontevedra. La actividad de la biofábrica de Pontevedra lleva suspendida desde el pasado 20 de julio debido a la bajada del caudal del río Lérez (del que se abastece la instalación) por debajo de su caudal ecológico.
El importe neto de la cifra de negocios ascendió a 787,1 millones en los nueve primeros meses, un 33,7% más que los 588,5 millones del mismo periodo del año anterior. El resultado bruto de explotación (Ebitda), alcanzó los 207,5 millones de euros, lo que supone un incremento del 141,8% respecto a los 85,8 millones del mismo periodo del ejercicio precedente.
La empresa explica que la subida del precio de la celulosa y la mejora del tipo de cambio continuaron impulsando el margen operativo del negocio, mitigando el efecto de la parada temporal de la biofábrica de Pontevedra y compensando la inflación generalizada en el coste de las materias primas.