Un zarpazo basta al Vilalbés en Viveiro (0-1)

Iván Díaz Rolle
IVÁN ROLLE VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

Xaime Ramallal

El cuadro mariñano sigue sin puntos tras asediar en el derbi provincial a un rival al que Santi Gegunde dio la victoria en su primera llegada clara, en el minuto 72

02 oct 2022 . Actualizado a las 19:09 h.

VIVEIRO CF, 0: Adrián Casillas; Carlos (Jerome, min. 75), Nico Madero, Edgar, Yepes; Schuster, Sergio Otero (Juan, min. 75), Rolle (Lucas Fanego, min. 80): Arona Sané (Arturo, min. 65), Iker Hurtado y Barroso. 

RACING VILALBÉS, 1: Santomé; Diego López, Vérez, Joel López, Buyo (Álex Pérez, min. 65); Javi Varela, Make (José Varela, min. 65), Pablo Rey (Dani Fernández, min. 80); Marcos Álvarez, Cuadrado (Santi Gegunde, min. 56) y Javi Rey (Rares, min. 80). 

GOLES: 0-1, min. 72: Santi Gegunde.

ÁRBITRO: Pereira Ferreiro (Lugo). Mostró la cartulina amarilla a los locales Rolle, Schuster, Sergio Otero y Edgar, a Suso Rey y Jandri en el cuerpo técnico y a Diego López por los chairegos.

INCIDENCIAS: Unos 250 aficionados en Cantarrana.

Un zarpazo bastó al Racing Vilalbés para conquistar el derbi y acercarse a la zona noble de Tercera Federación. El Viveiro dominó casi todas las facetas en el duelo de Cantarrana, pero sigue sin ningún punto tras cuatro jornadas por su falta de contundencia en las áreas. Los hombres de Alberto López asediaron por momentos a los chairegos, pero no tuvieron puntería y estuvieron blandos en la defensa de la acción en la que Santi Gegunde, recién ingresado desde el banquillo, resolvió ya en el minuto 72. Era la primera llegada de verdadero peligro de los visitantes al área de Adrián Casillas.

Los chairegos se defendieron con orden y no se complicaron con la pelota en una primera entrega donde el Viveiro llevó el control del juego, pero apenas inquietó. Santomé abortó sin dificultades los mejores intentos de Arona Sané y Rolle, mientras que los libres directos botados por el canterano zurdo y Sergio Otero desde posiciones de peligro se estrellaron en la barrera.

Los locales mostraron mayor decisión en la continuación. Iker Hurtado cazó un balón suelto en el área y exigió una estirada providencial del guardameta chairego, mientras que Schuster rozó el gol en un córner botado al segundo palo. El propio futbolista andaluz, indiscutible jefe en el centro del campo, probó fortuna también con un derechazo desde la frontal del área desviado por poco.

Mucho más firmes estuvieron los chairegos cuando su oportunidad al fin se presentó. A punto de llegar al cuarto de hora final, Marcos Álvarez encaró a Barroso en el perfil derecho, alcanzó la línea de fondo y puso un centro peligroso. Casillas llegó antes que José Varela para despejar, pero el balón le cayó a Santi Gegunde, que solo tuvo que empujar a la red con toda la portería a su disposición.

Con numerosas variaciones tácticas y cambios de por medio —con el juvenil Lucas Fanego reclamando protagonismo—, el guion siguió similar al abrirse el marcador. La posesión y las oportunidades siguieron en propiedad casi exclusiva de los celestes, mientras que Simón Lamas introdujo más músculo para resistir las acometidas.

Incluso así encontró el Viveiro caminos al área, aunque no al gol. Iker Hurtado cabeceó muy alto un centro de Barroso y Santomé voló para sacar de la escuadra una falta lanzada por Arturo. Con los locales volcados, Marcos Álvarez tuvo la sentencia en sus botas, pero su disparo colocado se perdió cerca del palo.