El arreón final de las rebajas en las tiendas de ropa funciona en A Mariña

clara rejes / j.a. VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

XAIME RAMALLAL

En el sector hay sensación de que la campaña se cerrará con buenas ventas

09 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Avanza el mes de agosto con el arreón final de las rebajas en el comercio textil. Los descuentos comenzaron en la mayoría de las tiendas el 1 de julio, aunque otras decidieron retrasarlo. Sea como sea, las gangas en los comercios animaron y siguen animando a que la gente se acerque y decida aprovechar las oportunidades finales.

Este mes también es la época de los compradores más rezagados y de los verdaderos cazadores de ofertas, de los que buscan en las segundas rebajas los auténticos chollos, aún con más descuento, pese a arriesgarse a quedarse sin tallas en sus prendas favoritas.

Los propietarios de comercios de la comarca consultados coinciden en que, al contrario de lo que está pasando en otras comarcas de Galicia, en A Mariña estas rebajas están consiguiendo recuperar un volumen de ventas similar a la época prepandemia. Una buena noticia que después de la alerta sanitaria y las restricciones les permite ver el vaso medio lleno, pero sin dejar de pensar en las posibles consecuencias de la inflación y de los augurios del impacto de la crisis a partir de septiembre.

José Ginzo, responsable de Ginzo Hombre-Mujer, con tiendas en Foz y Ribadeo, afirma que «o mes de xuño foi bo e neste mes que nos queda imos ter moito movemento nas tendas xa que se nota que os clientes están aproveitando o atractivo dos descontos para comprar prendas tamén de cara á seguinte tempada»

Sin restricciones

«Todos estábamos esperando volver a un verán ‘normal' e volver a ter máis movemento», añade Ginzo. Este año es el primer verano sin limitaciones por la pandemia. Las bodas se han reactivado y eso influye, y mucho, en las ventas de los comercios de ropa.

Desde Catycris, en Xove, su propietaria, Fina Soto, señala que se nota que la gente está con ganas de salir, de divertirse y por ende, de vestirse. «Nós comezamos as rebaixas a principios deste mes e están sendo uns moi bos días, estamos seguros de o que queda de verán vai seguir este ritmo», afirma la propietaria.

Lo que sí ha variado este año, según Fina Soto, es que los clientes compran con menos antelación. «Nós temos a boutique, entre outras, e vemos que agora os clientes compran máis sobre a data dos eventos como vodas ou comuñóns. Se unha familia ten un evento en setembro, antes compraban a roupa a principios de xullo, agora mesmo, nós estamos vendendo esa roupa en agosto, moito máis tarde. A xente tarda máis xa que pasamos moito tempo vendo como os compromisos sociais se cancelaban e postergaban. Iso fixo variar moito as costumes dos nosos compradores e das vendas», asegura Soto.

Otro tema es la subida general de los precios. «A volta a un verán sen restricións pesa moito a situación que podería provocar a inflación», asegura Juan López, de la tienda viveirense Madrás, que está liquidando.

La subida de los precios afecta a la economía de los clientes que, aunque esperan más a comprar, dice, se siguen animando. «Si que se nota na venda diaria que a xente ten un ritmo más pausado, pero está sendo unha boa campaña. Buscan un bo produto e un bo prezo, xusto o que lles ofrecen as rebaixas», afirma Juan López. De momento, las tiendas no notan tanto las consecuencias de la inflación y disfrutan del buen ritmo de las rebajas.