«Fue sorprendente, porque con los currículos de gente interesada en las ofertas de trabajo nos empezaron a entrar llamadas y correos electrónicos de personas que nos ofrecían sus negocios de hostelería. Había y hay de todo, gente que iba a dejar el local porque no tenían quien siguiese con el, porque los hijos no querían seguir, a otros que directamente lo querían dejar. Nos han llegado propuestas de Sanxenxo, de Vigo, de A Coruña, de muchos sitios. Y siguen entrando todavía. Muchas ya no las he contestado. También nos ofrecieron dos hoteles, pero muy pequeños, que no nos interesan», apuntó Juan Carlos Fernández.
Su propuesta (1.400 euros al mes de sueldo con alojamiento y manutención para los empleados) y la respuesta que tuvo, más de mil ofrecimientos, demuestra que sí hay gente interesada en trabajar en hostelería. Ocurre que tal vez la mayoría de las propuestas en sí mismas no son interesantes (sobre todo por los salarios, el horario y especialmente por la temporalidad que conllevan, exclusivamente por unas semanas o unos meses de verano). Ahí está el debate, pero se demostró que gente interesada sí hay.