El italiano detenido en A Mariña, reclamado por la Europol por chantaje y extorsión, envió a la víctima una cabeza de cordero al estilo de la Mafia y utilizó otras amenazas

La Voz VIVEIRO / LUGO / LA VOZ

A MARIÑA

PEPA LOSADA

No opuso resistencia; declaró desde el Juzgado de Viveiro ante la Audiencia Nacional y fue trasladado a prisión a Bonxe, donde permanece a la espera de ser extraditado

13 abr 2022 . Actualizado a las 15:15 h.

Este pasado martes por la mañana fue trasladado a los Juzgados de Viveiro un ciudadano italiano, con nombre italiano pero nacionalidad suiza, sobre el que pesaba una euro-orden de detención; concretamente era reclamado por la Europol, como avanzó este diario.

El hombre, de mediana edad (55 años), había sido detenido este lunes a última hora de la tarde en Foz, en concreto pasadas las 20 horas, por agentes de la UDEV de la Jefatura Superior de Policía de Galicia, que le seguía la pista. No opuso resistencia. En la villa focense habían alquilado un piso él y su pareja. La Policía procedió a su detención ejecutando la orden de la Europol, que venía reclamando su detención «por chantaje y extorsión».

La Europol es la Agencia de la Unión Europea para la Cooperación Policial. Europol ayuda a las autoridades policiales y judiciales nacionales a combatir la delincuencia internacional y el terrorismo.

El martes a mediodía el detenido declaró por videoconferencia ante la Audiencia Nacional desde el edificio judicial de Viveiro. Algunas fuentes directas apuntan a posibles vínculos con la Mafia italiana. De hecho, la técnica de extorsión es similar: enviaba a la víctima una cabeza de cordero para amenazarle. También amenazas diversas por mensajería a la víctima y a familiares. Llegaron a entregarle 110.000 euros producto de esa extorsión.

Fue trasladado a la prisión provincial de Bonxe, donde ingresó en torno a las cinco de la tarde del martes a la espera de ser extraditado ahora a Italia.

Su caso lo lleva el Juzgado Central de Instrucción Número 1, donde resuelven sobre la orden de detención y entrega, aunque la voluntad del detenido es no ser extraditado, según pudo saber esta Redacción.