Los verdaderos problemas para estos inquilinos se presentan en el día a día. No tienen quién resuelva cualquier incidencia.
«Fíjese, no hay limpieza de los espacios comunes desde hace 9 meses, como le he dicho, ¿y el mantenimiento del ascensor? Creo que acaba en junio de este año. ¿Y después? El suministro de agua caliente tiene pequeñas fugas, nadie lo repara. Si se presenta cualquier incidencia o avería en casa, hay que dirigirse a un correo electrónico de la Sareb, ¿y sabe qué pasa entonces? Me sucedió a mí, sale un señor desde Valladolid 21 días después de enviar el correo electrónico y me pregunta de qué se trata la avería. Una fuga de agua, fíjese. Que estamos en Burela, no en Valladolid. ¿En esas condiciones vamos a seguir? Que nos lo expliquen, me temo que sí», relataba un escéptico vecino que, en principio, piensa marchar.
Hay dudas y escepticismo entre las familias del edificio.