El estadio que pasó casi 900 días sin ver ganar a su equipo

Iván Díaz Rolle
I. DÍAZ ROLLE RIBADEO / LA VOZ

A MARIÑA

PEPA LOSADA

El Ribadeo rompió al fin contra la Residencia el maleficio que le perseguía en el Pepe Barrera

26 oct 2021 . Actualizado a las 19:37 h.

El Ribadeo FC se siente libre para volar en Preferente tras romper la maldición que le perseguía. Los goles de Criss y Roi Campos adjudicaron el domingo ante la Residencia (2-1) la primera victoria del curso a los hombres de Dani Moirón y permitieron que el Pepe Barrera viese ganar a su equipo por primera vez en casi 900 días.

La profunda remodelación a la que se sometió el estadio ribadense y la pandemia, además de los últimos resultados negativos, hacían que el Ribadeo arrastrase esta racha desde el 12 de mayo del 2019. Desde entonces hasta el domingo transcurrieron dos años, cinco meses y 12 días; exactamente 896 días.

Para encontrar la última victoria en su campo había que retroceder hasta la jornada 36 de la temporada 2018-19, cuando venció por 2-1 al Órdenes. Dos semanas más tarde cerraba la competición con una derrota en su feudo ante el Negreira.

Por las necesarias obras que se realizaron en un campo con un delicadísimo césped, la escuadra ribadense pasó en el exilio la siguiente campaña, interrumpida por el covid-19 en el mes de marzo. En el 2019-20, jugó como local habitualmente en As Valgas, en San Miguel de Reinante (Barreiros), pero también pasó por los focenses Martínez Otero y Malates, y acumuló seis victorias, cuatro empates y tres derrotas.

Un balance positivo que contrasta con el que acumuló en su ansiada vuelta al Pepe Barrera. En la Preferente exprés del año pasado fue incapaz de tumbar en casa a la Sarriana (1-1), el Santaballés (0-1), la Residencia (1-2), el Lemos (0-2) y el Foz (0-2). En la nueva liga también había tropezado con el Victoria (0-2) y el Lemos (3-3).