¿Cuál es el riesgo de usar el teléfono móvil cuando estás en la bañera?

José Francisco Alonso Quelle
J. ALONSO RIBADEO / LA VOZ

A MARIÑA

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Tras la muerte electrocutado de un vecino de Viveiro, los expertos aclaran que no supone peligro por su bajo voltaje, pero si está conectado a la red, cargándose, la cosa cambia. También influyen el cargador y, si se usa, un alargador. La bañera puede hacer efecto aislante provocando que no salte el diferencial

22 oct 2021 . Actualizado a las 09:27 h.

Los teléfonos móviles se han convertido para muchos en una extensión del brazo, pendientes de ellos a todas horas y en todos los lugares, también en el baño, donde muy de cuando en vez se dan accidentes fatales, de personas que fallecen electrocutadas al caer los dispositivos al agua.

Ocurrió este miércoles con un vecino de Viveiro de 38 años afincado en Madrid, y antes en Francia, donde en apenas medio año perdieron la vida dos adolescentes.

En Rusia, China, Inglaterra o Estados Unidos se han dado casos iguales. El temor es obvio: ¿se puede morir electrocutado si estás en la bañera y te cae el teléfono dentro? La respuesta es, teóricamente, no, salvo que el dispositivo esté conectado a la red eléctrica. Los móviles funcionan con voltajes bajos (5 voltios), que no constituyen mayor peligro para el ser humano. Pero si están enchufados a la red, por ejemplo para cargarlos, la cosa cambia. Este es el común denominador en todos los casos de personas fallecidas en estas circunstancias, que presentaban quemaduras en el pecho -como tenía el vecino de Viveiro- o en las manos, lo que da a entender que cuando sufrieron la descarga eléctrica podían estar manipulando los teléfonos.

Los expertos en seguridad, en todo caso, subrayan el peligro de usar aparatos eléctricos cerca del agua y si están enchufados recomiendan mantenerlos fuera del baño, también los secadores de pelo o los dispositivos para escuchar música.

 

¿Cuál es el riesgo de bañarse con el teléfono móvil al lado?

Si el móvil no está enchufado a la red lo normal es que, si cae al agua, como mucho, el dispositivo se averíe y quede inservible. La situación cambia si el teléfono está enchufado a la red, en proceso de carga. El voltaje que utilizan aparatos como teléfonos móviles o tabletas es muy bajo, de entre 3,5 y 20 voltios, sin riesgo para el ser humano (la legislación pone el tope en 24 voltios y la descarga que podría provocar la batería de un móvil es imperceptible). Pero si está enchufado a la red, si el cable del cargador se sumerge en el agua, un excelente transmisor de la electricidad, los 230 voltios de tensión que tiene el hogar se pueden trasladar a la propia bañera. Hay expertos que aclaran que, en todo caso, las posibilidades de que el accidente se produzca por un fallo en el cargador son remotas. «Teóricamente é moi difícil. O cargador reduce os 230 voltios a 5 e pode haber un fallo, pero a posibilidade é moi difícil», señala un ingeniero industrial.

¿Por qué no saltó el automático de la vivienda?

Lo normal es que si cae un aparato eléctrico al agua el diferencial salte, como mucho, a los 120 milisegundos, en cuanto se superan los 30 miliamperios por el circuito. Según las informaciones que han trascendido de la muerte de Santiago Otero, la policía está investigando si el automático de la vivienda saltó y se cortó la corriente eléctrica. Ocurre que el diferencial puede estar defectuoso y también que no todas las viviendas lo tienen (pasa con las construidas antes de 1972, salvo que se hayan hecho modificaciones en la instalación). También puede ocurrir que la bañera, de porcelana, plástico u otros materiales, ejerza como aislante y al carecer de toma de tierra no salte el automático.

¿Es importante el modelo del cable con el que cargamos el móvil?

Con independencia de que la premisa es no cargar el móvil en el baño, también es importante el cable que se utiliza. Los expertos opinan que los riesgos se multiplican si se usan cables baratos, que no cuentan con las protecciones de los originales oficiales, optimizados a las características de cada modelo. Si se usa un alargador, los riesgos se disparan. Ocurrió por ejemplo con el caso de una joven de Nuevo México (Estados Unidos), que llegó a enviar un mensaje con foto instantes antes de fallecer electrocutada. Estaba dándose un baño y la investigación reveló que el móvil no llegó a entrar en contacto con el agua, pero sí el alargador.

¿Cuál es pues la recomendación?

No usar los teléfonos móviles en el baño mientras se cargan. Es un riesgo innecesario. Y si estamos en la bañera, los aparatos eléctricos cuanto más lejos, mejor. De no ser así, el enchufe más cercano debe estar lo bastante lejos como para que con un cargador convencional el móvil, tableta o radio no llegue a la bañera.