Así vivió A Mariña los primeros días de la pandemia del coronavirus

Lucía Rey
lucía rey VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

Y hasta los parques infantiles se quedaron vacíos... Esta imagen fue tomada el 13 de marzo en el parque Pernas Peón de Viveiro. Apenas veinticuatro horas después, el día 14, el Gobierno central decretaba el estado de alarma por el coronavirus y la población de toda España quedaba confinada en sus domicilios
Y hasta los parques infantiles se quedaron vacíos... Esta imagen fue tomada el 13 de marzo en el parque Pernas Peón de Viveiro. Apenas veinticuatro horas después, el día 14, el Gobierno central decretaba el estado de alarma por el coronavirus y la población de toda España quedaba confinada en sus domicilios PEPA LOSADA

La gran demanda de mascarillas en las farmacias fue el primer síntoma de que algo pasaba

07 mar 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Parece increíble las veces que hoy a diario se pronuncia o se escucha alguna referencia al coronavirus cuando hace ahora un año era una realidad que todavía sonaba lejana, como permite recordar el hemerográfico de La Voz de Galicia, cuya edición de A Mariña hizo por primera alusión al covid-19 el 27 de febrero del 2020 en una crónica titulada: «Las mascarillas también se agotan en las farmacias de A Mariña». En ella, varias boticas hablaban de «perplejidad por lo que está ocurriendo y preocupación por el problema que se puede derivar para las personas que sí precisan de estas mascarillas». Hasta entonces, personas con algún tipo de patología respiratoria o por recibir tratamientos específicos. Un día después, el 28/02, eran los geles higienizantes los que se habían agotado en una jornada en la que La Voz daba cuenta de que Inditex tomaba precauciones «reduciendo los viajes a las zonas afectadas»: China e Italia, en aquel momento. Titulares de aquella jornada eran: «Crece la injustificada espiral de crisis mundial» y «Galicia sigue al margen, mientras aumenta la alarma en varios países».

El 6 de marzo Viveiro fue escenario de las primeras restricciones sociales en el Día de las Tres Gracias, donde no hubo «besos al santo ni se dio la paz» El 3/03, a 35 días del Domingo de Ramos, la Xunta de Cofradías de Viveiro confiaba todavía en que el covid-19 no repercutiese en las reservas de Semana Santa, al tiempo que las cofradías empezaban a coser y preparar los trajes para las procesiones. «Es mejor dejarnos conducir por las pautas que vaya marcando Sanidad, que en principio no son tan alarmantes», indicaba. Cuatro días después, el 6/03, en la capilla de la Misericordia de Viveiro, durante la romería de las Tres Gracias, se produjeron las primeras de las muchas restricciones que vendrían después. No hubo «besos al santo», ni se dio la paz durante la misa ni se depositó la comunión en la boca. «El miedo al coronavirus estuvo presente», relató la crónica.

Tras el aislamiento de unos 20 trabajadores de Ence Navia, el primer caso de covid-19 fue el de un focense de 60 años El lunes 9/03, un día después de las multitudinarias celebraciones del 8M, se decía que «siete nuevas víctimas elevan a 17 los fallecidos en España». En Galicia había entonces 6 casos. Veinticuatro horas más tarde, el 10/03, el covid-19 se aproximaba por vez primera a la comarca, ya que la dirección de Ence Navia decidía aislar en sus casas «por precaución» a una veintena de trabajadores que había tenido contacto durante un funeral en Navia con un hombre que dio positivo días después de regresar de Madrid.

Alcoa inaugura el teletrabajo

El miércoles 11/03 aparecía en escena el teletrabajo cuando contaba que Alcoa había empezado a ordenar a parte de sus empleados en el complejo industrial de San Cibrao que trabajasen desde casa. La multinacional estadounidense distribuía además un protocolo para prevenir la aparición de casos. También llegaban las primeras cancelaciones de actos lúdicos y sociales en la comarca, con Cervo suspendiendo provisionalmente la Festa do Ourizo prevista para el sábado 14. «El covid-19 amenaza con cerrar las puertas del deporte mariñano», advertían las páginas de deportes.

El primer acto social cancelado en la comarca por la irrupción del covid-19 fue la Festa do Ourizo de Cervo, prevista para el sábado 14 de marzo del 2020 El jueves 12/03, el coronavirus empezaba a adueñarse también de la información local. El periódico de ese día explicaba que personal de enfermería y auxiliares de enfermería voluntarios del Hospital Público de A Mariña, de Burela, iban a comenzar a realizar a domicilio pruebas del coronavirus para tratar de frenar la expansión de la enfermedad. «La aparición de un foco en Foz ha precipitado la formación del equipo», señalaba la información.

En la misma jornada se publicaba el anuncio del Concello de Foz aplazando la comida de mayores programada para aquel fin de semana y suspendiendo los bailes dominicales de la Sala Bahía. Además se tenía conocimiento de que un focense de 60 años permanecía ingresado con coronavirus en el Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA). Ribadeo y Viveiro instalaban dispensadores en sitios estratégicos, y Mondoñedo suspendía su concentración de motos por el riesgo de contagio. El viernes 13/02 se avanzaba que Galicia suspendería las clases desde el lunes 16. Un día después, el 14/03, el Gobierno central decretaba el estado de alarma, comenzaba el primer confinamiento, y el resto, más que historia, es el pan nuestro de cada día.