«Quero pensar que esta vez Alcoa vai vender, pero a ver que nos din!»

Lucía Rey
lucía rey CERVO / LA VOZ

A MARIÑA

PEPA LOSADA

Trabajadores de San Cibrao se muestran esperanzados con la reunión de hoy

22 feb 2021 . Actualizado a las 11:18 h.

Con más esperanza de la que tenían hace unos meses miran al futuro los trabajadores de la planta de aluminio de la fábrica de San Cibrao. A las 11.30 horas de este lunes dará comienzo la reunión telemática que Alcoa ha convocado para informar a los sindicatos y a la Xunta de Galicia sobre la marcha del proceso de venta de la citada planta a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), y los más de 500 trabajadores de Aluminio y los alrededor de 400 de la industria auxiliar que operan en ella tendrán su atención puesta en ella. «A ver qué pasa, ojalá lleguen a un acuerdo», explica Natalia Fraga Grueiro, vecina de Viveiro de 45 años que lleva cerca de 19 empleada en el complejo industrial de San Cibrao, en el que también trabaja su marido. De que fructifiquen o no las negociaciones entre la multinacional estadounidense y el Gobierno español depende su horizonte laboral y personal.

«Antes lo veía todo negro, ahora por lo menos está gris», cuenta la mujer, que explica que, tras el fin de la huelga, en la fábrica se vuelve a trabajar con normalidad aunque cada vez es más evidente la falta de mantenimiento y la necesidad de inversión. Una idea en la que incide otro trabajador de Aluminio, Jose Pernas Míguez. Este viveirense cree que la solución más viable a la delicada situación que atraviesa la planta después de que el año pasado Alcoa anunciase un ERE para más de 530 trabajadores, una medida que finalmente no pudo llevar a cabo, es la venta. «Vendéusenos a moto da intervención [de la planta por parte del Estado], pero agora sabemos que iso non vai vir. E máis sabendo como están neste momento sectores coma a hostalería», reflexiona. Confía en que finalmente la planta en su conjunto, también la de Alúmina, sea vendida a un inversor que apueste por ella decididamente, con una fuerte inversión tecnológica y medioambiental que garantice su continuidad a largo plazo.

«En este momento soy bastante positiva, y en la fábrica también noto a la gente más positiva. Antes lo veía todo negro y ahora por lo menos hay una esperanza. Desde que acabó la huelga estamos trabajando a turnos con normalidad. A ver qué pasa y ojalá lleguen a un acuerdo», Natalia Fraga, trabajadora de fundición en Alcoa San Cibrao
«Hai que ter fe e quero pensar que esta vez o proceso de venda de Alcoa á SEPI vai ir para diante, pero as dúbidas están aí. Os traballadores o que temos que facer é seguir traballando, pero o covid demostrou que non podemos vivir só do turismo, e que sen industria non hai futuro», Jose Pernas Míguez, trabajador de la planta de Aluminio