La borrasca Álex destroza el campamento de Alcoa y deja a la intemperie a los trabajadores, que siguen al pie del cañón

María Cuadrado Fernández
M. CUADRADO SAN CIBRAO / LA VOZ

A MARIÑA

Pepa Losada

Otra noche de viento, lluvia y frío han soportado empleados de la multinacional y de las auxiliares, que siguen controlando los accesos a la factoría e impidiendo la salida de aluminio

02 oct 2020 . Actualizado a las 11:12 h.

Contra viento y marea, y haciendo frente a la borrasca Álex continúan las 24 horas del día y de la noche trabajadores de Alcoa y de empresas auxiliares en el campamento instalado a las puertas de la factoría de San Cibrao. La borrasca destrozó la pasada noche parte de las instalaciones, levantando las carpas y obligando a los trabajadores a continuar con sus acciones a la intemperie. La pasada ha sido otra noche de lluvia y de frío, y desde primera hora de la mañana de este viernes los operarios esperan la llegada de unas casetas de obra para continuar con sus acciones.

No permiten la salida de aluminio de la fábrica mariñana y realizan tareas informativas y de control en los vehículos que entran y salen de las instalaciones. Se han organizado por turnos para mantener de forma continua esta tarea. Revisan todo el material que entra para que no se pueda usar para una hipotética parada de las cubas A lo largo del día de hoy están previstas reuniones para organizar cuestiones internas y de servicios dentro de la factoría.

Los trabajadores concentrados sí permitieron la salida de un camión que transportaba hidrato para una empresa farmacéutica y una potabilizadora, según confirmaron varias fuentes.

Pepa Losada