Se vende fábrica de aluminio por 1 euro

F. Fernández REDACCIÓN / LA VOZ

A MARIÑA

XAIME RAMALLAL

Alcoa, dispuesta a pagar 92 millones a Liberty, que exige 142 millones y un contrato de suministro de alúmina por veinte años, algo que la multinacional estadounidense considera inaceptable

01 sep 2020 . Actualizado a las 23:00 h.

Alcoa está dispuesta a vender su fábrica de aluminio en San Cibrao (Cervo) por el precio simbólico de 1 euro y, además, a desembolsar 110 millones de dólares (92 millones de euros) en aras de facilitar la operación con GFG Alliance, perteneciente al grupo británico Liberty, con el que está negociando el traspaso de la planta. 

Pero al nuevo inversor no le parecen suficientes estas concesiones y el acuerdo entre las partes brilla por su ausencia, según avanzó la multinacional estadounidense. Así, GFG, detalló Alcoa, acepta comprar la fábrica a cambio de 1 de euro, pero exige que Alcoa asuma costes por 170 millones de dólares (142 millones de euros). Además, «se niega a comprometer financiación propia para la viabilidad futura de la planta» y tampoco ha proporcionado «un plan de negocio que describa cómo garantizará el futuro de la planta de aluminio y aportará una solución energética competitiva».

Los reproches de Alcoa no acaban aquí: asegura que GFG se comprometió a asumir las pérdidas que está registrando la fábrica de aluminio, que cifra en un millón a la semana, pero que ahora solo se muestra dispuesta a aportar esa cantidad, pero al mes.

Las diferencias entre ambas partes no son solo económicas sobre el importe de la transacción o la asunción de las pérdidas de la planta. También sobre las condiciones del contrato de suministro de alúmina. Este producto, con el que se elabora el aluminio, procedería de la planta ubicada también en San Cibrao y cuya titularidad comparte Alcoa con un grupo australiano.

Alcoa le ofrece a Liberty un acuerdo por cinco años, pero el grupo británico quiere atar veinte, un período «sin precedentes en el mercado y fuera de los límites de las prácticas habituales de esta industria», subrayó la multinacional del aluminio. Además, el grupo británico insiste en obtener un derecho de tanteo sobre la fábrica de alúmina en el caso de que salga a la venta. GFG aspiraba a comprar todo el complejo industrial de San Cibrao (las fábricas de aluminio y de alúmina), pero la multinacional estadounidense descarta desprenderse de la segunda.

«Alcoa ha hecho concesiones muy importantes para avanzar hacia un acuerdo sobre las condiciones de la venta de la planta de aluminio y GFG Alliance sigue con demandas que están fuera del acuerdo con los representantes de los trabajadores y/o que no son razonables como prácticas comerciales», subyara la multinacional estadounidense.

Ambos grupos acordaron el 13 de agosto iniciar una ronda de negociaciones durante seis semanas para la venta de la planta de aluminio. Pactaron dividir las conversaciones en tres períodos distintos. El domingo pasado finalizó el primero de ellos, durante el que debían pactar las condiciones generales de la operación, pero las posiciones están de lo más distanciadas.

Las conversaciones continuarán hasta finales de este mes. De ellas depende el futuro de 534 trabajadores, sobre los que pesa un expediente de despido colectivo, que conllevaría el cierre de la última fábrica de aluminio de España.

El año pasado, Alcoa ya vendió por un precio simbólico las plantas de A Coruña y Avilés, que también elaboraban aluminio, al fondo suizo Parter, al que, además, se comprometió a inyectarle 100 millones de dólares a lo largo de dos años para el sostenimiento de las instalaciones, a cambio de que durante ese tiempo mantuviese operativas las fábricas y preservase los algo más de 600 puestos de trabajo. Parter revendió los activos al grupo industrial Riesgo, que asumió los compromisos adquiridos y recibe las compensaciones por parte de la multinacional estadounidense.