Miles de personas claman en Foz contra el cierre de la única fábrica de aluminio de España

M. C. / P. L. / S. SERANTES FOZ/ LA VOZ

A MARIÑA

Pepa Losada

«A Mariña sálvase loitando», el grito de guerra frente a la amenaza de Alcoa de dejar en la calle a más de ochocientos empleados

15 jun 2020 . Actualizado a las 17:34 h.

Con el grito de guerra «A Mariña sálvase loitando», miles de personas se manifestaron desde las once de la mañana hasta poco después del mediodía de este domingo en Foz.  En régimen de autoconvocatoria, clamaron por las calles de la villa focense en otra movilización contra el cierre de la única fábrica de aluminio primario de España. Protestaron, una vez más, contra la pretensión de Alcoa de despedir a 534 empleados de esa planta de su factoría de San Cibrao, con lo cual no solo se perderían esos puestos de trabajo directos, sino también alrededor de 350 de personal de las empresas auxiliares.

Pepa Losada

Se concentraron frente a la playa de A Rapadoira y, tras caminar coreando consignas en defensa del empleo y exigiendo a la Administración que actúe ya, sobre las 11.40 horas llegaron al puerto. Sumando apoyos, a diez minutos del mediodía pararon frente a la dársena portuaria, donde varias lanchas recreativas hicieron sonar sus bocinas y, con bengalas encendidas, lucían carteles en defensa de los empleos que Alcoa quiere suprimir en A Mariña, perjudicando a una comarca donde ha obtenido beneficios durante diez de los doce años que ha gestionado una empresa inicialmente pública.

Ataviados con sus trajes de faena, el presidente del comité de otros sindicalistas encabezaban la manifestación con la pancarta que expresa el lema de su lucha: «A Mariña sálvase loitando». Trabajadores de las plantas de aluminio y alúmina portaban un ataúd negro que resume el sentir de miles de mariñanos, lucenses y gallegos: «Si Alcoa pecha, enterramos A Mariña». Y las víctimas directas y colaterales salpicarían a los quince municipios del norte lucense, cuyos topónimos aparecen escritos en la tapa del féretro.

«SOS A Mariña», para el dron que graba desde el aire las protestas, dibujaron con sus cuerpos los empleados de la factoría de San Cibrao y otros manifestantes en la explanada portuaria focense. Ahí concluyó la movilización, pasados unos minutos del mediodía.

Pepa Losada

Igual que en todas las protestas en defensa de la principal industria de la provincia de Lugo, y una de las más relevantes de Galicia, apelan al Estado, emplazándolo a implantar con urgencia el marco energético estable con un precio de la electricidad que permita a la industria electrointensiva española competir en igualdad con la de países como Francia o Alemania. Anunciado hace más de un año, ni siquiera se conocen los detalles.

Salvar la fábrica de aluminio primario y mantener los empleos que genera ha sido la consigna de otra movilización que pretende transmitir a Galicia y a toda España cuánto se juegan la sociedad y la economía nacionales si Alcoa consuma su amenaza de suprimir el único modo de garantizar al menos parcialmente el abastecimiento de aluminio. Alrededor de la quinta parte del que necesita España se produce en San Cibrao. 

Pepa Losada

La movilización de este domingo prologa una semana crucial, acaba el proceso informal de consultas marcado por Alcoa, dispuesta a continuar con su plan e iniciar a partir de media semana el proceso formal de despido colectivode 534 empleados de la planta de aluminio. Sin resultados concluyó la mesa multilateral del pasado martes entre el Gobierno, la Xunta, la multinacional y los sindicatos. Al día siguiente, el encuentro bilateral entre Alcoa y el comité de empresa de San Cibrao confirmó que la pesadilla del cierre de la fábrica puede hacerse realidad de modo inminente, con el agravante de que la multinacional no quiere continuar produciendo, pero tampoco parece dispuesta a vender la factoría para que puedan hacerlo otros.