El puerto mariñano mueve ahora el 50 % de la Autoridad Portuaria de Ferrol, que perdió el carbón para As Pontes
12 ene 2020 . Actualizado a las 22:39 h.Casi medio año con un recorte de un 11,5 % en la producción de aluminio primario de Alcoa en San Cibrao le ha pasado factura al puerto comercial de San Cibrao, uno de los que gestiona desde Ferrol la Autoridad Portuaria. Durante 2019 cayeron un 18,6 % los tráficos en las dos radas respecto a 2018; alrededor de un 7 % en el muelle mariñano que explota en exclusiva la multinacional del aluminio. Si en Ferrol obedece al desplome de las descargas de carbón con destino a la paralizada central térmica de As Pontes, en San Cibrao responde a la peliaguda situación de Alcoa. Aun así, con el cambio de escenario, A Mariña gana peso en el organismo público ferrolano, aportando la mitad de las mercancías.
Porcentualmente, San Cibrao aumenta su contribución a la Autoridad Portuaria un 7 % respecto a 2018. Aunque esa entidad no desglosa la actividad de sus instalaciones, los detalles de los tráficos indican que en San Cibrao se movieron el año pasado unos 5,4 millones de toneladas, 0,4 menos que el ejercicio anterior. La mayoría, de bauxita, la materia prima para el proceso productivo del aluminio y la alúmina: entraron 3,96 millones de toneladas, un 6,5 % menos. Si la bauxita es ahora el principal producto de los puertos ferrolano y mariaño, la alúmina que sale de Alcoa es tercera, tras el carbón, con 1,19 millones, un 2,6 % menos.
«Urge» estatuto electrointensivo
A mucha distancia se sitúa la sosa cáustica líquida para Alcoa, 270.000 toneladas el año pasado, casi igual que en 2019. A menos también ha ido el coque, combustible que pasó de 90.000 toneladas en 2018 a 76.000 en 2019. Al contrario que el año pasado, entre las quince mercancías más destacadas de la Autoridad Portuaria ya no figura el aluminio, cuando hace dos años salieron de San Cibrao 50.000 toneladas.
Por todo lo que representa en sus cuentas, la entidad de Puertos del Estado que rige desde la ciudad ferrolana el gran muelle comercial lucense «cree de vital importancia la aprobación urgente de un estatuto que permita a las empresas electrointensivas planificar su gestión y disponer de una tarifa competitiva y estable que asegure su futuro».
Migajas para A Mariña de los más de sesenta millones que se llevó el gestor público ferrolano
Públicamente no han trascendido cambios en la concesión exclusiva de Puertos del Estado a Alcoa en San Cibrao. Por tanto, vencerá en tres años. Para la entidad pública que rige esa rada desde Ferrol, significará seguir recaudando más de tres millones anuales en una infraestructura donde no invierte porque el mantenimiento lo asume Alcoa. De los más de sesenta millones de euros que se ha llevado desde 1993, solo ha dedicado migajas a A Mariña, menos del 1 % de los beneficios que genera su puerto.
Por eso a partir de 1994 comenzaron las protestas, denunciando la casi nula reinversión en la comarca de los ingresos de San Cibrao. Se sucedieron y repitieron, en la mayoría de ocasiones coincidiendo con campañas electorales, pero ni el Gobierno estatal, del que depende el puerto de Alcoa, ni la Xunta cumplieron nunca los innumerables anuncios. En definitiva, sigue sin órgano propio de gestión un cuarto de siglo después de las primeras reivindicaciones. Tampoco se ha hecho realidad un proyecto avalado técnica y económicamente por la Xunta y el Estado hace 20 años: preparar el muelle que no usa Alcoa para abrirlo al tráfico general y convertirlo en el gran puerto comercial de Lugo.
En octubre, en vísperas de las últimas elecciones generales, la Diputación de Lugo aprobó por unanimidad demandar por enésima vez al Estado una autoridad portuaria para San Cibrao, la apertura al tráfico del muelle que no usa Alcoa y, de momento, «máis peso da Mariña» en el actual gestor de San Cibrao.