Han sido desmanteladas en Mondoñedo, Ourol, Valdés, Navia y en Barreiros la última
21 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Plantaciones de marihuana en el interior de viviendas y anexos en A Mariña y el Occidente asturiano están siendo descubiertas y desmanteladas por la Guardia Civil por su exagerado consumo eléctrico, a menudo acompañado de fraudes manipulando la línea de suministro de electricidad para no pagarla, lo que hace saltar las alarmas a las compañías eléctricas, que a su vez informan a la Guardia Civil.
Así fueron detenidos en septiembre dos vecinos de Mondoñedo que tenían en una vivienda 35 plantas de marihuana y 1.500 gramos de cannabis listos para su venta.
En octubre eran cuatro los vecinos de Viveiro a quienes detenían, como responsables de una plantación profesional de cultivo de marihuana en una vivienda de Ourol. Usaban lámparas reflectoras con bombillas de 600 vatios, de las que se incautaron los agentes. También hallaron 136 plantas de marihuana de diferente tamaño e inflorescencias, detectando en el registro indicios que apuntaban a otra instalación desmantelada en un anexo de la vivienda. La Guardia Civil se puso sobre alerta cuando la compañía suministradora denunció un posible fraude de 1.100 euros, solo correspondiente a dos meses de consumo eléctrico.
A estas dos operaciones en A Mariña se suma una más, la última de momento, en Barreiros, donde han sido detenidos dos hombres acusados de tráfico de drogas y de defraudar fluido eléctrico. Sin descartar más apresamientos, las fuerzas de seguridad los consideran responsables del cultivo de unas mil plantas cuyo peso estima unos 200 kilos, en un chalé de Áspera, que antaño albergó un establecimiento hostelero.
Los detenidos son un vecino de Valencia de 46 años y otro de Ourense de 63. Técnicos de la compañía eléctrica localizaron «una instalación subterránea de cableado desde un poste de la luz que entraba en la vivienda». La plantación, en el bajo del inmueble, estaba equipada con aire acondicionado, sistema de riego por bombeo y diversos sistemas de control de calor y humedad, así como un gran número de ventiladores y lámparas para acelerar el crecimiento y florecimiento. Utilizaban lámparas reflectoras con bombillas de 600 vatios.
En el Occidente de Asturias, la Operación Green de la Guardia Civil logró desarticular en septiembre cuatro puntos de producción y venta de marihuana, deteniendo a cinco personas e investigando a otras tres, incautándose además de más de 1.200 plantas de marihuana. El 18 de septiembre en una vivienda de Valdés y sus anexos hallaron 14; el 23 de septiembre, en un registro en un domicilio de Tapia, guardias de los puestos de Tapia y Boal intervinieron dos plantas de Cannabis Sativa, una placa de 100 gramos de hachís, seis dosis de metadona, 12 gramos de marihuana y hachís dispuestos en dosis para su venta, dos básculas de precisión, teléfonos móviles, varios lápices y tarjetas de memoria, un ordenador portátil, un machete de grandes dimensiones, dos espráis de autodefensa y más de 500 cartuchos de munición del los calibres 22, 9 milímetros parabellum, 7,65 browning y calibre 38, además de 2.250 euros en metálico.
A los dos días, la Guardia Civil entró en otra casa de Valdés, donde se incautó de más de 400 plantas de marihuana. Ese mismo día, por la tarde, en otro registro domiciliario en Navia, los agentes localizaron una plantación de 502 plantas y otras 430 ya recolectadas y secas, listas para el envasado. Además, en un congelador intervinieron cuatro bolsas de marihuana congelada en verde con un peso de casi dos kilogramos.