Miembros de la Asociación Central de Jubilados expusieron sus demandas al alcalde y a otros cargos
12 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El presidente y varios directivos de la recientemente creada Asociación Central de Jubilados y Pensionistas de Foz fueron recibidos este miércoles en la casa consistorial por varios cargos municipales, con el alcalde al frente. Desde el colectivo le expusieron nuevamente la necesidad de recuperar el local de los jubilados en el Centro Social, del que fueron desalojados a finales del 2016 y que actualmente usa la asociación Virxe do Carme. El presidente del colectivo, José Severino Vaz, denunció el olvido al que somete el Concello al conjunto de los jubilados, privándoles de usar el local que tuvieron durante 94 años y dejándolos en la calle, sin alternativa.
El regidor Francisco Cajoto aseguró que desde el primer momento abordaron esta reclamación para que los jubilados tengan su propio espacio. En la reunión les avanzó que no adoptará una solución inmediata, ya que será necesario aclarar ciertas cuestiones. Indicó que habrá que reubicar a los usuarios de la asociación Virxe do Carme en otras instalaciones y que, una vez libre el local del Centro Social, será necesario ejecutar obras en los aseos para adaptarlos a la normativa vigente, y también será necesario definir cómo se gestionará el local, si será abierto por un funcionario municipal —como la Casa da Xuventude— o si a mayores se contemplará la explotación del bar. En este segundo caso habría que decidir si el bar se sacará a licitación por concesión o si el centro carecerá de negocio hostelero. No obstante, estas cuestiones están condicionadas a los presupuestos municipales, que deberán recoger una partida para las obras. ¿En qué fase están los presupuestos? «Estamos traballando para que se aproben en xaneiro», manifestó el regidor.
El presidente de los jubilados reiteró el derecho que tienen de recuperar el local. «Recoñecen que temos dereito ao local, pero pídennos que lles deamos tempo», puntualizó Vaz, quien asegura que desde la asociación no bajarán la guardia a la hora de defender sus derechos, como recoge la escritura, que ayer volvió a mostrar en el Concello y que contempla la donación del edificio del Centro Social al Concello.
