La Costa da Morte pide otro espacio expositivo arqueológico para evitar la fuga de piezas
26 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Probablemente sea como clamar en el desierto, pero no por ello vamos a dejar de hacerlo. A Mariña lucense tiene uno de los patrimonios arqueológicos subacuáticos más ricos e interesantes de toda la cornisa norte, como se está demostrando y como destacan los expertos. ¿Por qué no crear aquí un museo arqueológico subacuático o un museo de naufragios?
El naufragio del bergantín Palomo y de la fragata Magdalena en la ría de Viveiro es uno de los que forman parte de nuestra historia; es cierto que restos importantes de este naufragio están ya en el museo de la Armada en Ferrol. ¿Por qué aquí en Viveiro nada?
No hay que olvidarse de los pecios en los fondos marinos de Xove; del galeón hundido en la ría de Ribadeo, una joya, dicen los expertos ?como el propio arqueólogo subacuático Miguel San Claudio- que es el mejor conservado del mundo y para el que Ribadeo desea que sea declarado Bien de Interés Cultural. Y tantos pecios más que se hallan en el fondo de nuestras aguas del Cantábrico. Como A Mariña la Costa da Morte (que por algo se llama así) tiene una historia repleta de naufragios: también allí demandan que su patrimonio hundido quede en ese lugar y que se abra un museo arqueológico. Todo lo referido a navegación marítima y más si se trata de naufragios debería de tener un tratamiento casi sagrado, como recurso cultural, patrimonial, identitario, tanto en la Costa da Morte como en A Mariña.
Las autoridades locales de A Mariña, de A Costa da Morte, deberían remar todos en una misma dirección o reivindicación. ¿Cuál sería o es el problema? Los localismos. A Mariña cuenta con una ventaja añadida: ya tiene un Museo del Mar. ¿Por qué no aprovecharlo? ¿Por qué las ánforas de nuestros mares se van a otros museos? ¿Por qué restos de pecios o de naufragios se van todos o al Museo del Mar de Vigo? Otra cosa es, a lo mejor, el Museo de la Armada de Ferrol, donde se conservan restos importantes de naufragios históricos como el de la ría de Viveiro.
Pero abrir un debate no estaría de más, y defender que el patrimonio subacuático de A Mariña quede en A Mariña. Mirando, por qué no, su rentabilidad económica en una zona eminentemente turística como es la costa lucense.