A Mariña tirita a cinco grados bajo cero en la noche más gélida en meses

s. serantes VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

PEPA LOSADA

Las diferencias entre las mínimas y las máximas alcanzaron los diecisiete grados

06 ene 2019 . Actualizado a las 16:42 h.

Aunque el clima suave la caracteriza habitualmente, A Mariña no se ha librado esta vez de la masa de aire polar que recorre Europa. El tiempo ha pasado de ser un socorrido tema de conversación a convertirse en un comentario generalizado. Todo el mundo habla del intenso frío, que este viernes y este sábado ha ido en aumento. Gran parte de la comarca amaneció el sábado de Reyes teñida de blanco, no por nieve, sino por heladas tan fuertes que en algunos lugares se mantuvieron hasta después de mediodía. Las temperaturas cayeron hasta los cinco grados bajo cero que midió Meteogalicia en su estación de Lourenzá, donde también se registró la mayor oscilación térmica porque el mercurio subió hasta 12,5 grados. Nada menos que 17,5 grados de diferencia entre la mínima y la máxima.

Sobre todo en las proximidades del mar o de los ríos, la sensación térmica que apuntaba Meteogalicia en determinados era en algunas zonas más fría que la indicaban los termómetros.

En la estación meteorológica de Vilamor, en Mondoñedo, el mercurio descendió hasta 3,7 grados bajo cero y subió hasta 12,1 positivos, con lo cual las temperaturas oscilaron 15,8 grados.

En Viveiro, en Borreiros, Meteogalicia registró una mínima de 1,9 grados bajo cero y una máxima de 11,9, de tal modo que la diferencia llegó a 13,8 grados.

Hasta 1,4 grados bajo cero llegó el termómetro en la estación de Foz, donde subió hasta 11,5 sobre cero, por lo que hubo 12,9 grados de oscilación térmica.

0,2 grados sobre cero fue la mínima que marcó el mercurio este sábado en A Pontenova, donde la máxima llegó a 14,5, con lo cual las temperaturas un total de variaron 14,7 grados.

Meteogalicia midió en Ribadeo, en la estación de Pedro Murias, una mínima de 1,6 grados y una máxima de 11,9; lo que representa 13,5 de diferencia.

A más altitud que ninguna de las otras están las estaciones de Penedo do Galo, en Viveiro, y del monte Castelo, en Burela, que este sábado registraron las temperaturas más suaves: 4,2 grados de mínima y 12,4 de máxima en la viveirense y 4,6 de mínima y 9,6 de máxima en la burelense.