Escaso consuelo en A Mariña con las pedreas y terminaciones de la lotería

La Voz

A MARIÑA

PEPA LOSADA

Es improbable que se recupere lo jugado

23 dic 2018 . Actualizado a las 22:00 h.

Con el paso de la horas y al echar cuentas, las caras largas que se observaban por la mañana en las administraciones de lotería de A Mariña al concluir el sorteo fueron mudando. Porque si bien es improbable que se recupere lo jugado, sí tocaron pedreas, terminaciones y centenas que supusieron cierto consuelo.

En la administración de Viveiro, donde ya por la tarde se acercaron vecinos a cobrar, se vendieron pedreas (en el bar O Avó de Chavín, la peña barcelonista de Espasante y peluquería Julio), terminaciones y reintegros. Fue una tónica que se repitió. Desde la de Foz, Nieves Rodríguez, apuntaba que «para nós sempre é mellor o sorteo do Neno ca este». En Lourenzá esta vez no descorcharon champán, pero desde la administración apuntaban que vendieron pedreas y estimaban que habrían repartido sobre medio millón en premios.

En la administración de Ribadeo vendieron 5.100 décimos premiados con 100 euros cada uno. Fueron tres números completos, una pedrea (170.000 euros) y dos terminaciones (340.000 euros). «Y muchos reintegros, infinidad de sietes», apuntaba la titular, Leticia Fernández, satisfecha este año tras el sorteo del año pasado, «que de los peores que recuerdo en mi vida».

Desde la administración de Burela vendieron una pedrea por medio de la asociación Esperanza contra el cáncer, y el Rompeolas y el Nordés 1.600 décimos con las dos últimas cifras del Gordo, premiados con 120 euros cada décimo. Así, la suerte salpicó aquí y allá por toda la comarca.