Luis Salaverri, de 77 años, será homenajeado en la segunda entrega del Fiouco Gran Fondo
06 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Para Luis Salaverri (Lugo, 1941) nada es más placentero que pedalear. Ni hay mejor tratamiento contra la oxidación. El veterano ciclista mindoniense recibe hoy en Mondoñedo un reconocimiento a sus años de entrega a la bici. Al más puro estilo Tour de Francia, la primera curva del alto de O Fiouco llevará su hombre y allí se descubrirá esta tarde una placa en su honor. El homenaje fue idea del Club Toxiza y abre los actos de la segunda edición del Fiouco Gran Fondo.
-¿Le hace ilusión?
-Mucha. Una cosa es que te homenajeen los compañeros de trabajo cuando te jubilas y otra bien distinta que lo hagan tus colegas de afición. Los sentimientos no son los mismos.
-Igual hasta se emociona...
-A ver... Ya sabes que los viejos tenemos tendencia a eso.
-Lleva más de 60 años subido a la bici. ¿Se considera un pionero del cicloturismo en A Mariña?
-Cuando empecé éramos tres aficionados los que nos juntábamos: Serra, de Viveiro, Paco, de Cordido, y yo. Y no recuerdo si había otro en Ribadeo. Estamos hablando de finales de la década de los 50, sobre el 58 más o menos.
-¿Recuerda cómo era su primera bicicleta?
-Claro. Era una de carreras de la marca Gilson y con cambio de plato que funcionaba con una palanca. La compré en Lugo y me costó 2.400 pesetas. Fui a buscarla en el coche de línea y ya volví a casa en ella.
-¿Sufrió algún accidente?
-Alguno sí, pero afortunadamente nada grave. De chapa y pintura, como digo yo (risas).
-¿Y sigue pedaleando a diario?
-Prácticamente a diario. Hago entre 20 y 25 kilómetros y eso que ahora estoy un poco limitado porque hace 8 años sufrí un infarto bastante fuerte.
-¿Cuál fue su mejor aventura sobre la bici?
-Tengo varias. La ascensión que hice al Angliru cuando tenía 67 años, sin duda, y una escapada que hice a Noia con mi compañero de batallas, José Manuel Otero, para ver a una amiga. 174 kilómetros del tirón Fue en el año 94 y tardamos 6 horas y media.