El Martínez Otero, escenario de un partido de Preferente 2.289 días después

La Voz

A MARIÑA

Gayol no lamenta bajas para el estreno en casa; el Ribadeo visita el feudo del Montañeros y el Viveiro tiene una test de nivel en As Pontes

02 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Seis años y cuatro meses después, el CD Foz vuelve a jugar un partido de Preferente en su estadio. Transcurrieron 2.289 días desde aquella sonrojante derrota por 0-8 frente al Bertamiráns, en la última jornada del curso 2011-2012, hasta el estreno como local de hoy en su nueva etapa en la categoría delante de un rival ya curtido y con galones como el Dubra. «Agardamos que a afección estea igual de ilusionada ca nós nesta volta a Preferente», señala el técnico, Jesús Gayol, que no debe lamentar bajas en su plantel -Ibán Gayol parece recuperado- y completó una convocatoria con 17 futbolistas por las molestias que arrastran algunos de ellos.

Tras el revés por 2-1 en el feudo del Puebla, el batallón rojiblanco tratará de inaugurar su cuenta de puntos en una segunda jornada con viajes para los otros equipos mariñanos. El Viveiro tiene un reto mayúsculo en O Poboado ante el As Pontes, «un clarísimo candidato al ascenso», en opinión del técnico viveirense. El cuadro celeste comparecerá en el campo del líder con la misma nómina de bajas que en el partido inaugural -los lesionados Aitor, Juanín y Xesús- y con novedades en la alineación. «Espero que entremos en el partido con mejor pie que el día del Arzúa», apuntó Chusky.

El Ribadeo, por su parte, se cruza con un recién ascendido reforzado para aspirar a más que a la permanencia: el Montañeros «Teñen moitos xogadores que competiron en Terceira e seguro que estarán por la parte alta da táboa», pronostica Rafa Casanova, el preparador del cuadro mariñano, consciente de que una nueva victoria sería «importantísima» para los ánimos de sus pupilos. Javi Prieto, Brais y Vizoso, por lesión, y Criss y Fernando, por motivos personales, causan baja en una convocatoria ribadense a la que vuelve Santi.