Burela subastará hoy las últimas toneladas de bonito de la costera

Lucía Rey
lucía rey BURELA / LA VOZ

A MARIÑA

PEPA LOSADA

Tres barcos del puerto mariñano vendieron ayer en torno a 20.000 kilos del túnido

28 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Si no se producen novedades oficiales de última hora, Burela despedirá hoy la costera del bonito más corta de la historia con la subasta de las capturas del Regino Jesús, uno de los pocos barcos con base en el puerto burelense -apenas media docena- que ha participado en la campaña del atún blanco de este verano. Ayer hubo dos pujas en esta lonja mariñana: la primera comenzó sobre las seis de la mañana, con el túnico capturado de manera artesanal y recién descargado por tres embarcaciones: el Nuevo San Prudencio, el Cruz y Cristo, y el Ramón Estefanía. En total se vendieron alrededor de 20.000 kilos, como señaló el presidente de Armadores de Burela, S.A., Abelardo Basanta. «Viñan de pouquiños días, do remate da costeira, e por iso non traían tanto peixe como as veces anteriores», indicó.

Los precios volvieron a ser muy buenos, ya que el kilo de bonito cotizó en la primera venta a entre 3,48 y 8,95 euros. El precio del mono, de un tamaño más pequeño, osciló entre los 1,60 y los 3,50 euros el kilo. La segunda subasta de la jornada tuvo lugar a última hora de la tarde con el bonito de un único buque: el Nuevo Libertad. El viernes vendieron en Burela cuatro boniteros con base en el puerto pontevedrés de A Guarda, que ayer seguían amarrados en A Mariña. La Secretaría General de Pesca anunció que prolongaría hasta el 23 de agosto la costera, que inicialmente iba a acabar el 17.

«Hai tanto bonito que vai quedar no mar comendo bocarte, e nun ano os científicos dirán que acabamos con el nós», dice el presidente de ABSA, Abelardo Basanta

Igual que ocurrió hace unos meses con la xarda, la flota artesanal de A Mariña vuelve a tener que decir adiós a una campaña pesquera cuando está en su momento álgido. En esta ocasión, a la del bonito, que tradicionalmente se extendía hasta finales de septiembre e incluso mediados de octubre. «As cotas son moi pequenas e temos a esperanza de que ao acabar tan cedo este ano se demostre que o recurso está moi ben, e que o ano que vén as autoridades terán que aumentar a cota», explicó el presidente de Armadores de Burela, S.A. (ABSA), Abelardo Basanta. Asegura que el Cantábrico está «cheo de peixe», especialmente de atún blanco, lo que, en su opinión, acabará generando nuevas polémicas en el sector. «Este ano o bonito meteuse no golfo de Vizcaya porque hai moito bocarte. O bonito sabe ben o que fai, anda a comer, como facemos nós, como fan todos os peixes. O problema é que ao acabar tan cedo a costeira hai tanto bonito que vai quedar no mar comendo no bocarte, e dentro dun ano, os científicos dirán que os pescadores acabamos con el, que non hai, e quererán reducir a cota outra vez», vaticina.

Muchas ballenas y delfines

En opinión de Abelardo Basanta, las ballenas y los delfines que se han avistado en las últimas semanas en aguas mariñanas son la mejor prueba de que los caladeros próximos a la costa cantábrica están en buen estado, con mucha cantidad de pescado.