A los concesionarios ya les piden tantos vehículos de gasolina como de gasoil
22 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.En lo que va de año, la cifra de ventas de vehículos de gasolina no deja de crecer. Los concesionarios de A Mariña y el Occidente asturiano consultados coinciden en que es una tendencia que se veía venir en los últimos años, pero que se ha agudizado en las últimas semanas tras el anuncio del Gobierno de subir el impuesto del gasoil; y sobre todo tras las palabras de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, augurando que el diésel tiene los días contados.
Los concesionarios advierten de los prejuicios y demonización de un combustible, el gasoil, que dicen está siendo mejorado para reducir las emisiones de dióxido de carbono.
Apuntan a que la desinformación en materia de emisiones es generalizada, pero que lo más preocupa a los consumidores en cómo afectará a su bolsillo y qué va a pasar con el futuro de sus vehículos de gasoil. Concesionarios como Puerta Norte (Ribadeo y Foz), Carastur (Barres) y Viveiro Automoción Iglouco lamentan la alarma generalizada y aclaran que la compra de cada conductor ha de ser personalizada según sus condiciones económicas, su consumo y sus kilómetros anuales.
Los profesionales coinciden en que en materia de contaminación los vehículos actuales cumplen con la normativa Euro 6 de la UE, y en que el problema está en la antigüedad del parque móvil nacional, con 12 años de media, debido a la pasada crisis.
«Preguntamos cuántos kilómetros va a hacer al año, y a partir de ahí aconsejamos»
«Creemos que esta demonización no está justificada. El incremento de ventas de coches de gasolina viene siendo una constante ya desde hace unos años, aunque últimamente se ha disparado. En los últimos años las cifras han dado un vuelco total. Hemos pasado de vender un 60% de vehículos diésel y un 30% de gasolina a invertir el porcentaje» comenta Jaime Iglesias, comercial de Renault y Dacia en Viveiro Automoción Iglouco.
Aun así, aclara que la gente que viaja mucho a lo largo del año, sigue confiando en los diésel como primera opción.
«Nos encontramos con una falta de stock de vehículos de gasolina. Ahora mismo un comprador puede tardar en recibir su coche un par de meses ante este cambio de la demanda. Siempre preguntamos cuántos kilómetros realiza al año y a partir de ahí aconsejamos, pero la gente tiene mucho miedo ahora mismo a comprar un coche», añade.
Con todo, Jaime Iglesias apunta también que cada vez más los clientes que se interesan por otro tipo de vehículos: GLP (gasolina y gas licuado), híbridos y eléctricos. Mientras en Renault y Dacia los primeros ya son una opción real de compra debido a su precio similar a un coche de gasolina y a que es bastante económico repostar, la apuesta por híbridos y eléctricos es menor, ya que todavía no han penetrado lo suficiente en el mercado por su elevado coste y también por su limitada autonomía.