Uno ya mejora las impresionantes vistas, y A Cova do Santo se inaugurará este viernes
20 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Un banco-mirador instalado sobre una roca, en un nivel del monte inferior al de la capilla, y una gruta entre enormes rocas refuerzan los alicientes del área recreativa de San Roque, en Viveiro. Ambas son iniciativa de la Mancomunidad de Montes de San Roque, Santa María Maior e Penedo do Galo, cuyo presidente Carlos Méndez explica que las han hecho pensando en los viveirenses y los visitantes.
Construido con madera de acacia talada en esos montes viveirenses, el banco ofrece unas impresionantes de vistas de Viveiro y su entorno, mejorando las que ya había desde los aledaños de la capilla, como han comprobado las numerosas personas que se han acercado en los pocos días que lleva abierto para hacerse fotografías y disfrutar de espectaculares panorámicas.
A Cova do Santo, este viernes
Aún habrá que esperar hasta este viernes para ver en todo su esplendor la gruta que han preparado los comuneros aprovechando una cavidad natural entre enormes rocas. Ahí donde la leyenda cuenta que se resguardó el copatrón de Viveiro, han instalado una imagen en piedra de San Roque, con el perro y el cayado. Una verja protege A Cova do Santo, un paraje que parece llamado a convertirse en otro de los lugares de Viveiro.
Carlos Méndez explica que el banco y la gruta son parte del proyecto permanente de mejora y ampliación del área recreativa de San Roque. Con el entorno donde se ubican han preparado una superficie de unos 3.000 metros cuadrados, parte de ellos aptos para caminar.
A las seis y media de la tarde de este viernes se inaugura A Cova do Santo, en un acto al que asistirán Carlos Méndez, el arquitecto Santi Meitín y el canteiro Abraham Corujo.