José Ángel Blanco, reelegido cuatro años más al frente de Os Irmandiños

José Francisco Alonso Quelle
j. alonso RIBADEO / LA VOZ

A MARIÑA

JOSÉ ALONSO

Tras la integración en CLUN, la marca mariñana seguirá aún activa. En 2017 facturó 13,4 millones en pienso

05 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La cooperativa Os Irmandiños se constituyó el 6 de marzo de 1976 (entonces denominada Cooperativa de Campo Agrícola) y cuarenta años después, el 16 de diciembre de 2016, daba un paso adelante al constituir con Feiraco y Melisanto una cooperativa de segundo grado, CLUN, con tres grandes objetivos: la integración y potenciación de los servicios técnicos-económicos; la optimización del precio de los suministros, y agregar volumen para mejorar la cadena de valor láctea y así contribuir a su estructuración. Os Irmandiños transfirió sus activos y pasivos, adquiriendo una participación en CLUN del 35,41 %, que fue valorada en 11,5 millones de euros. Las cuentas de 2016 de Os Irmandiños aún reflejaban la realidad de la cooperativa, pero las de 2017 que se presentaron a los cooperativistas hace unos días ya se remiten al nuevo escenario, con muchos epígrafes vacíos porque ya es CLUN quien los representa.

Con todo, las cooperativas originales, aunque centralizadas en CLUN, siguen existiendo y por lo tanto, legalmente corresponde periódicamente renovar los cargos directivos. Fue lo que se hizo en la asamblea general de Os Irmandiños, en la que se presentaron las cuentas y se eligió al nuevo presidente durante cuatro años más, que seguirá siendo José Ángel Blanco, a su vez, presidente de CLUN. «O que pretendemos facer é unha xornada cos socios de CLUN en Santiago, un acto informativo, máis aló do legalismo das asembleas. Por moito máis volume de actividade que teñamos queremos seguir tendo unha canle de comunicación cos socios, porque todo é deles», explicó el presidente.

Respecto a la actividad particular de Os Irmandiños, que salvo en el caso de la venta de pienso ya apenas se refleja en las cuentas anuales y en el informe de gestión de 2017, Blanco apuntó que el número de cooperativistas permanece estable, rondando el millar, así como el de empleados, algo menos de un centenar.

«A nivel de socios -añadió Blanco-, quizais non se aprecien grandes movementos, pero estamos traballando moito. Penso que, sobre todo, proporcionouse estabilidade ao sector. Agora mesmo, co tema do leite hai máis estabilidade porque as empresas fixeron contratos a longo prazo, e aínda que van referenciados a un índice, non hai estes cambios grandes no prezo que había antes. E do que depende de nós, na compra de materias primas, non prevemos cambios importantes, porque xa temos unha importante cantidade comprada».

Las ventas de pienso en 2017 en la cooperativa, su tradicional principal vía de ingresos, ascendió a 13.463.081 euros, frente a 14.097.366 euros facturados en 2016. Os Irmandiños gastó 13.517.893 euros en la venta de mercancías, materias primas y otras materias consumibles en 2017, frente a 13,3 millones en 2016. Además, a 31 de diciembre de 2017 tenía compromisos de compra de materias primas para este año por importe de 2.880672 euros.

Más allá del balance presentado a los socios, si nos atenemos al informe Ardán, Os Irmandiños habría facturado 36,6 millones en 2017 y tendría 87 trabajadores. Este dato supondría una sustancial mejoría sobre 2016, cuando cerró el ejercicio con unas ventas de 31,4 millones de euros.