La tala de cien árboles desnuda al parque viveirense Pernas Peón

s. s. VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

XAIME RAMALLAL

Sin sesenta pinos ni 32 grandes eucaliptos, reabrirá la próxima semana y en un futuro se repoblará

24 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Se mire desde donde se mire, el viveirense parque Pernas Peón se ha quedado sin una notable parte de la arboleda que lo vestía. Parece semidesnudo, tras la tala de cerca de unos sesenta pinos, casi todos los que había, y de unos 32 grandes eucaliptos. Y aún está previsto cortar al menos otro par de pinos, que también han sido atacados por la procesionaria, y algunas tuyas. Sin unos cien árboles, dos zonas del parque próximo a la playa de Covas y a los institutos son campos vacíos.

Ayer estaba previsto acabar con la tala de eucaliptos, pero los trabajos se prolongarán unos días más, explica Jesús Fernández Cal, concejal de Medio Ambiente de Viveiro. Si es posible, querrían reabrir el parque al público la próxima semana, quizás el miércoles. Cerró el pasado día 9, cuando la empresa Maderas Chavín empezó a sanear la arboleda del Pernas Peón porque la procesionaria había secado los pinos, lo mismo que parte de los eucaliptos; en ese caso porque «fueron perforados de forma premeditada». Al gobierno viveirense no le ha resultado «fácil la decisión», pero ha optado por «primar la seguridad de las personas, por encima de cualquier otra circunstancia», declaró Cal.

«Ahora que ya no hay peligro», tanto el concejal de Medio Ambiente como la alcaldesa viveirense reiteraron la voluntad de repoblar el parque. Es parte de un proyecto más amplio, que incluye la instalación de bancos y la reparación del suelo.

220 toneladas de madera

La empresa a la que el Concello le ha adjudicado la tala estima que habrán hecho unas 170 toneladas de madera de pino y unas 150 de eucalipto, según el edil Cal. Maderas Chavín abonará al Concello alrededor de diez mil euros, aplicando el precio pactado en el concurso que convocó pidiendo ofertas a tres firmas.

La intención de las autoridades locales que encabeza María Loureiro sería destinarlos a la repoblación, pero aclaran que depende de los informes del departamento financiero del Concello. Para un futuro también queda una poda en altura de ramas de eucaliptos que siguen en pie.